Rosa Escudero es una ingeniera y emprendedora peruana que con esfuerzo, creatividad e inteligencia ha hecho empresa con éxito en Costa Rica. Su amor por la comida de nuestro país, le dio la idea de importar productos nacionales a ese país centroamericano, al cual llegó para cursar una maestría.
“Soy una emprendedora peruana de corazón”. Así se define Rosa Escudero a sus 49 años. Nació en Lima, su niñez y adolescencia la pasó en Surco. Recuerda con nostalgia y alegría, a sus amigos del vecindario. Fue una gran época para ella, sin duda.
En la familia de Rosa hay varios ingenieros, así que no había que ser adivino para saber el camino profesional que tomaría. Además entendía con suma facilidad las matemáticas.
Su padre José, ingeniero mecánico, y su madre Rosa, la impulsaron para que en 1990 ingresara a la Universidad de Lima con el propósito de graduarse como ingeniera industrial.
Rompiendo estereotipos
En su cuarto año como universitaria, empezó a trabajar en Rosymar Perú, empresa fundada por su padre dedicada al mantenimiento industrial de productos.
Con 22 años, se encargó del área comercial, y así descubrió su pasión por el marketing y la administración.
“Estaba encargada de la parte comercial, ventas, clientes, era una etapa interesante porque era la única mujer en la empresa, teníamos que romper ese paradigma o estereotipo de que solo los hombres podrían ser parte de una empresa de ingeniería”, manifestó.
Tras culminar la universidad, decidió cursar la especialización de marketing hasta 1998, año en que se pone como objetivo estudiar una maestría fuera del país.
A Costa Rica
En una reunión con compañeros de estudios, le llamó la atención la escuela de Incae, como lugar para seguir una maestría en el exterior.
“Sabía que mi inglés no era bueno y decidí ir a una universidad de habla hispana. Averigüé mucho sobre las escuelas y escogí la Incae”, recordó.
Finalmente optó por ingresar a Incae Costa Rica, escuela en la que empezó las clases en setiembre de 1998.
“Escogí Costa Rica luego de investigar un poco el país y su contexto social. Imaginé las playas, pero cuando aterricé me llevé una gran sorpresa porque estaba todo nublado y con fuertes lluvias”, rememora sonriente al evocar el inicio de su vida fuera del Perú.
En el segundo año de maestría, Rosa conoce a quien hoy es su esposo, Manrique Kopper, quien le propuso matrimonio antes de que ella viajará a Venezuela.
Y es que nuestra compatriota radicaría un año en tierras venezolanas. Trabajó como gerente de marca de comida infantil de la empresa Polar.
La empresa propia
El 2001, Rosa regresó a Costa Rica para contraer nupcias con Manrique e iniciar juntos una vida familiar. Con la experiencia laboral que acumulaba y sacando a flote ese espíritu emprendedor, Rosa decidió tener su negocio propio.
“Cuando llegue a Costa Rica, veía el crecimiento de los productos peruanos en diversos lugares del mundo. Extrañaba mucho nuestra sabrosa comida. Visite restaurantes peruanos y al terminar mi comida siempre me preguntaba ¿qué le falta…? “Su Inca Kola”, me respondía a mí misma. Es así como nace mi idea”, nos comenta sobre la “partida de nacimiento” de su exitoso emprendimiento.
Con mucha emoción y confianza de su éxito, funda la empresa Inversiones KR Kopram, dedicada al rubro de exportar productos peruanos al mercado costarricense, constituido por más de 5 millones de habitantes.
El inicio fue difícil para Rosa. Algunos proveedores que no veían en su idea una buena fuente de negocios se negaban a entregar sus pedidos. Sin embargo, no había lugar para el fracaso.
Por ello, Rosa viajaba constantemente a Perú para cerrar pedidos de manera presencial y que estos sean enviados a Costa Rica.
Orgullo peruano
“Yo siempre decía si en el Perú hay marcas extranjeras que compiten con los peruanos, ¿por qué aquí, en Costa Rica no puede competir un producto peruano?. Es gratificante ver un producto peruano en los mostradores”, anotó.
Tras 20 años de arduo trabajo, hoy los productos peruanos que importa Rosa son vendidos al público costarricense en las cadenas Walmart.
“Se pueden ver productos peruanos al costados de marcas europeas. La Cusqueña está al costado de Heineken, eso me motiva a seguir creciendo”, expresó orgullosa nuestra compatriota.
Lo que empezó como una pequeña idea de negocio se ha convertido en una empresa cuyo objetivo es ser el centro de distribución de productos peruanos en Centroamérica.
Y lo va consiguiendo, pues varios productos empezarán a ingresar al mercado de El Salvador, expandiendo de ese modo, la marca Perú a esa parte del continente.
Más datos:
-El Instituto Centroamericano de Administración de Empresas-INCAE Business School es una escuela de negocios internacionales ubicada en el campus Francisco de Sola en Nicaragua y en el campus Walter Kissling Gam en Costa Rica.
-Walmart es una corporación multinacional de tiendas de origen estadounidense, que opera cadenas de grandes almacenes de descuento y clubes de almacenes. En Costa Rica, Walmart cuenta con 249 tiendas operativas.
-El Salvador es un país de América Central. En el año 2021 contaba con una población estimada en 6 325 827 habitantes siendo el país más densamente poblado de esa parte del continente.
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(FIN) NJC/RES