Cusco se convirtió en la primera región del Perú en aplicar un sistema integral de lucha contra la corrupción al designar a la primera servidora pública responsable de conducir, dirigir la implementación de la política regional de integridad pública y lucha contra este flagelo social, con miras a ser un modelo de desarrollo nacional.
Rossy Gamarra Mercado, abogada de profesión, fue elegida responsable de la Oficina de Integridad Pública Interventor Preventor en sesión del consejo de coordinación regional (CCR), órgano consultivo y de coordinación del gobierno regional con las municipalidades. En una próxima sesión del CCR fundamentará su plan de trabajo para los siguientes seis meses.
El gobernador del Cusco, Jean Paul Benavente, dijo que en la elección primaron la neutralidad y la innovación, tras destacar que se trata de un hecho histórico en la lucha contra la corrupción que facilitará, permitirá agilizar y transparentar los procesos de gestión del gobierno regional con la participación ciudadana.
Sostuvo que consentirá la articulación del sistema de integridad pública como un modelo de desarrollo nacional. “Se trata de impulsar un verdadero proceso de lucha contra la corrupción en una lógica de participación ciudadana, de coordinación entre los niveles de gobierno y sociedad civil”, refirió la autoridad cusqueña.
La elección de la profesional estuvo a cargo de una comisión especial, cuyos criterios fueron validados por los integrantes del CCR y un comité de vigilancia. “No se trata de una sola persona ni una oficina, sino de un sistema que no sustituirá funciones de la Contraloría. Permite transparentar, con la participación ciudadana, los procesos de gestión del gobierno regional. Hoy damos el gran salto para ser el modelo de desarrollo nacional”, reafirmó Benavente.
Modelo
Por su parte, Igor Elorrieta Agramonte, subgerente de Planeamiento, Ordenamiento y Demarcación Territorial, resaltó la importancia de la designación porque, por primera vez, desde una región se aporta un modelo para luchar contra la corrupción.
Detalló que este sistema anticorrupción está conformado por la Oficina de Integridad, agencias de desarrollo regional y las gerencias regionales.
Entre sus principales funciones, mencionó, la flamante servidora pública conducirá y dirigirá la implementación de la política nacional y regional de integridad y lucha contra la corrupción.
Asimismo, tendrá la responsabilidad de conducir la identificación, diseño, formulación e implementación del sistema de integridad pública e interventor preventor a través de estrategias que establezcan las actividades, acciones y plazos que permitan alcanzar los objetivos planteados.
En la reunión virtual-presencial de los integrantes del CCR participaron alcaldes provinciales, representantes de la sociedad civil, gerentes y directores de proyectos.