Luisimar Catashunga y Magdalena Flores son dos lideresas indígenas que, junto a más de 60 mujeres de comunidades en la provincia loretana de Ramón Castilla, cerca de la frontera con Brasil y Colombia, salen adelante con la venta de sandalias y la cosecha de yuca para la elaboración de la fariña, a orillas del río Amazonas.
Esta alternativa de negocio es impulsada desde el año pasado por el Programa Nacional PAIS, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), por medio del tambo Mario Rivera.
En la plataforma de servicios, las madres de familia reciben capacitaciones virtuales para la decoración de los calzados con acabados de perlas de fantasía y talleres productivos para la elaboración de derivados de la yuca. Además, se les brinda semillas para optimizar cultivos adicionales en época de vaciante del río.
“Debido a la creciente del río en invierno, elaboramos las sandalias como una fuente de ingresos. Con el internet del tambo y el apoyo de la gestora, descargamos videos para aprender a decorar las sandalias con las perlas de fantasía y venderlas a los turistas y personas que llegan a esta zona de frontera”, contó Luisimar, madre de un niño de 3 años y lideresa de la comunidad indígena Alberto Fujimori.
Tres monedas
Al vivir en el límite de Perú, Colombia y Brasil han tenido que adaptarse al uso del real brasileño, el peso colombiano y el sol como monedas para la venta de sus productos. Señaló, por ejemplo, que por cada par de sandalias obtienen 50 reales, que en moneda peruana son cerca de 34 soles.
Las mujeres de la comunidad Rondiña II van de dos a tres veces al mes al tambo para participar en talleres productivos en los que aprenden a optimizar sus cultivos de yuca. Magdalena Flores, madre lideresa de este poblado, resaltó que han pasado de cosechar sus productos para consumo personal a verlos ahora como una oportunidad de negocio para las familias agricultoras.
“La fariña elaborada de yuca es la base de la alimentación de los pueblos amazónicos. Más de 60 familias recibimos capacitaciones productivas en el tambo y ahora lo vemos como un emprendimiento para sacar adelante a nuestra comunidad. Cada kilo de fariña lo vendemos a 5 soles o 5 reales”, señaló la lideresa indígena.
Talleres de gastronomía
La inclusión económica que se promueve en el tambo Mario Rivera se complementa con talleres de gastronomía sobre la base de productos de la zona como la fariña y la tapioca, que son dirigidos a las madres de comunidades aledañas a la plataforma de servicios.
En lo que va del 2021, el trabajo territorial intersectorial que se gestiona desde el tambo Mario Rivera ha permitido que cerca de 2,500 personas de nueve centros poblados, en el distrito de Yavarí, accedan a servicios priorizados del Estado que contribuyen a mejorar la calidad de vida de peruanas y peruanos en zona de frontera.