El conocimiento que se tiene sobre el uso y los beneficios de las tarjetas de crédito como métodos de pago es limitado. En ese sentido, esta herramienta se traduce como una modalidad de financiación, en donde el usuario asume la obligación de devolver el importe dispuesto y de pagar los intereses, comisiones bancarias y gastos en un tiempo definido, pero también puede ser una gran herramienta de ahorro si se le da un uso correcto.
De acuerdo con una encuesta realizada por Ipsos en junio del 2020, alrededor de 8.6 millones de peruanos del sector urbano entre 18 a 70 años se encuentran bancarizados, lo cual representa el 51% de la población urbana del país.
Además, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (Inei), dio a conocer que, del total de personas que se encuentran bancarizadas, el porcentaje del uso de tarjetas de débito continúa muy por encima del uso de tarjetas de crédito.
Por ello, el Banco Ripley presenta cuatro recomendaciones para ahorrar con el uso de la tarjeta de crédito:
1. Atento a los descuentos en compras. Las tarjetas de crédito suelen ofrecer descuentos y promociones de todo tipo para ahorrar en compras de establecimientos con los que tienen una alianza; incluso hay tarjetas que devuelven un cierto porcentaje del importe de todas las compras.
2. Compara los costos de membresía. La membresía anual es un cobro legalmente permitido cuyo monto debe estar señalado en el contrato firmado con la entidad financiera. Sin embargo, hoy en día hay varias opciones de tarjetas de crédito que excluyen este monto, haciendo más atractiva su oferta.
3. Utiliza los programas de lealtad. Los sistemas de fidelidad permiten ganar puntos a medida que se van realizando compras con las tarjetas de crédito. Al completar una determinada cantidad, se podrá canjear estos puntos como si fuera efectivo.
4. Crea un buen historial crediticio. Probablemente este sea uno de los principales beneficios de las tarjetas de crédito, ya que tener un historial crediticio que demuestre puntualidad y responsabilidad con los pagos, abrirá oportunidades a mediano y largo plazo. Por ejemplo, se puede acceder a créditos hipotecarios y empresariales con mejores condiciones como una tasa baja de interés.
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