¿Sabías que los actos de acoso sexual en los sistemas de transporte público están penados por ley y pueden ser sancionados hasta con 15 años de cárcel? Si eres víctima o testigo de un caso de acoso sexual, no guardes silencio, avisa de inmediato al conductor, cobrador o cualquier miembro de la tripulación para recibir ayuda.
El acoso se manifiesta de diversas formas: verbal (comentarios e insinuaciones de carácter sexual), gestual (gestos obscenos), física (tocamientos indebidos, roces corporales), y exhibicionismo (mostrar los genitales).
Para prevenir estos actos, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) cuenta con un Protocolo de atención ante acoso sexual en el transporte público. Este tiene como objetivo proteger a los pasajeros y garantizar una atención adecuada a las víctimas de agresiones sexuales en los buses.
Si deseas conocer más sobre el contenido del protocolo, puedes descargarlo en el siguiente enlace del
MTC.
Al ser informado de la agresión, el conductor o cobrador debe alejar a la víctima del agresor y contactar a la línea 105 de la Policía Nacional del Perú (PNP) para activar el protocolo. Luego, el chofer debe llevar el vehículo al punto de control policial más cercano o acercarse a un inspector de transporte, fiscalizador o personal de serenazgo.
Una vez que el conductor se encuentre con un representante de la autoridad, detendrá el vehículo para que este se haga cargo de la situación. Si se trata de un oficial policial, se procederá a la detención inmediata del agresor, así como a la recopilación de los datos de la víctima y los testigos.
Para el transporte interprovincial, los casos de acoso deben ser notificados a la Policía de Carretera o a un inspector de la Sutran. Esta coordinación con las autoridades es esencial para garantizar una respuesta rápida y efectiva ante estas situaciones.
Asimismo, el sistema del Metropolitano cuenta con la Brigada Antiacoso de la ATU. Además, tiene módulos de atención del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), difusión de audios en embarques y buses. Así como filas exclusivas para personas niñas, niños, adolescentes y mujeres.