Faviana Gavidia, con tan solo 21 años, marcó un hito en el levantamiento de pesas al ganar la medalla de bronce en los Juegos Bolivarianos 2024. En su debut internacional, demostró que la pasión y el sacrificio pueden convertir los sueños en realidad, inspirando a su país con cada levantamiento.
Desde temprana edad, Faviana demostró que el deporte sería una parte fundamental de su vida. Su incursión en el levantamiento de pesas, impulsada por su pasión, curiosidad y el apoyo de su familia, fue un giro inesperado que la cautivó desde el primer momento y marcó el inicio de su camino hacia el éxito.
"Siempre he hecho deporte; comencé con gimnasia como pasatiempo. Desde pequeña, uno de mis sueños era representar al Perú, pero no se dio la oportunidad en gimnasia. Más adelante, tuve la ocasión de practicar levantamiento y entré a CrossFit gracias a mi mamá. Lo que más me llamó la atención fue el levantamiento olímpico", manifestó a la Agencia Andina.
“Empecé a entrenar cuando tenía 16 años, y desde el primer momento sentí una conexión especial con este deporte: fue amor a primera vista. A medida que avanzaba, levantando más peso y mejorando en mis entrenamientos, me cautivó aún más el levantamiento, y decidí quedarme”, agregó.
Aunque al principio el levantamiento de pesas era un terreno dominado por lo masculino, Faviana ve con alegría cómo más mujeres se suman a esta desafiante disciplina. “Cuando conocí este deporte, veía que había más hombres practicándolo que mujeres. Me parece increíble que ahora este deporte esté ganando más reconocimiento y visibilidad”, comenta.
La primera medallista de la delegación
Faviana nunca imaginó que recibir la primera presea del ´Team Perú´ en los Juegos Bolivarianos, pero la constancia y la disciplina que la caracterizan fueron clave para alcanzar este logro inesperado.
"Ser la primera medallista en estos Juegos Bolivarianos fue algo que no esperaba, llegó de manera inesperada. Todo se alineó para que pudiera obtener esta primera medalla”, expresó.
Para nuestra deportista, el premio obtenido no solo representa un logro personal, sino también un impulso para seguir persiguiendo sus sueños. Con la vista puesta en el futuro, esta medalla es solo el comienzo de un camino lleno de ambiciones, donde su mayor motivación sigue siendo representar a Perú con orgullo y alcanzar nuevas metas.
"Fue una motivación más para seguir representando a mi Perú. Esta medalla ha sido el inicio de un camino que tengo planeado para el futuro, y quiero llegar mucho más lejos, siempre representando a mi país", refirió.
Sueños en el horizonte
Con los pies en la tierra, nuestra deportista nacional tiene metas claras: competir en los Juegos Panamericanos de Lima 2027 y, eventualmente, llegar a los Juegos Olímpicos. “El próximo año habrá varias competencias nacionales, y luego tenemos los Juegos Bolivarianos. Con mucho esfuerzo, vamos a darle con todo para seguir aumentando peso y alcanzar ese objetivo”, finalizó.