La Corte Suprema de Estados Unidos bloqueó este jueves la decisión del presidente republicano Donald Trump de terminar la protección para los "dreamers", un grupo de 700,000 jóvenes llegados al país sin papeles junto a sus padres cuando eran niños.
El alto tribunal secundó las opiniones de cortes inferiores y consideró que sería "caprichoso" y "arbitrario" poner fin al programa adoptado por el presidente demócrata Barack Obama en 2012 para dar protección contra las deportaciones y permisos de trabajo a estos jóvenes, principalmente oriundos de América Latina y muchos de los cuales no recuerdan su país de origen.
A menos de cinco meses de las elecciones, Trump calificó la decisión en Twitter como "horrible" y "políticamente cargada".
"¿No les da la impresión de que no le gusto a la Corte Suprema?", inquirió el mandatario después de que en la misma semana el alto tribunal emitiera una opinión sobre los derechos de los trabajadores homosexuales y transexuales que molestó a Trump.
Muchos "dreamers" dijeron sentir "alivio" por la decisión, pues ya estaban preparándose para "lo peor" tras años de incertidumbre desde que Trump decidiera terminar con el programa.
"Yo me estaba preparando para lo peor", contó a la AFP Jesús Contreras, un paramédico que vive en Houston y que estaba en el limbo desde que Trump decidió terminar el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) en 2017.
"Todavía tenemos que luchar por tener una legislación, pero tengo una buena sensación al saber que estamos protegidos y a salvo, al menos por ahora", agregó Contreras.
"Puedo volver a respirar"
Este programa permite a los jóvenes trabajar, estudiar y conducir, por lo que si no existiera estarían condenados a vivir sin papeles.
Para Geraldine Chinga, una joven de 29 años llegada de Perú cuando era niña, recibir esta decisión fue como sacarle un peso de que le impedía respirar.
"Esta fue la mejor noticia de todo este año. Es un alivio tan grande, (...) puedo volver a respirar", agregó.
Pese a la pandemia de coronavirus, un grupo de jóvenes protegidos con mascarillas se congregó en las escalinatas de la Corte Suprema en Washington, con una pancarta que decía "Estamos aquí para quedarnos".
Esta es una de las decisiones de la Corte Suprema más esperadas de la temporada y, debido a que los jueces conservadores son mayoría, había expectación sobre la decisión.
Finalmente, el magistrado John Roberts sumó su voz a la de los cuatro jueces progresistas para apoyar la permanencia del programa.
"No estamos decidiendo si DACA o su terminación son políticas fundadas. Nos referimos sólo a si la agencia cumplió con los requerimientos de procedimiento que le otorgaran una explicación razonada para su acción", escribió Robert en el acta.
Parte de la familia estadounidense
El expresidente Barack Obama celebró la decisión en Twitter, al señalar que hace ocho años impulsó este plan para "proteger de la deportación a personas que fueron criadas como parte de la familia estadounidense".
"Hoy me siento feliz por ellos, por sus familias y por todos nosotros", agregó.
Joe Biden, que fue vicepresidente de Obama y ahora busca enfrentarse a Trump en las elecciones de noviembre, prometió que si llega a la Casa Blanca trabajará para que este estatuto sea "permanente", con el envío de un proyecto de ley al Congreso en su primer día de gobierno.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, señaló que esta decisión prolonga la vida de un programa que, según una encuesta publicada esta semana, tiene el apoyo de tres cuartos de la población, tanto de demócratas como de republicanos.
"Esta es la forma estadounidense de hacer las cosas y me siento muy orgullosa de ello", afirmó la legisladora demócrata.
El gobierno de México -de donde provienen un 80% de los "dreamers"- destacó a través de su Cancillería que la continuidad del programa "es un reconocimiento al valor y trabajo de la comunidad inmigrante en Estados Unidos".