Los productos plásticos de cualquier tipo se han convertido en un gran aliado en la guerra contra el covid-19, ya que actualmente pueden combatir la propagación de virus tipo sars covid, sars cov-2 y beta coronavirus, que son del tipo covid-19 al 99.8% de efectividad, ya que en su proceso de fabricación se le dota, a través de nuevas tecnologías, es decir, permiten que no se contaminarían con ningún virus y posteriormente se biodegradarían, protegiendo la salud humana y el medioambiente.
Actualmente estos productos plásticos son elaborados con aditivos d2p, desarrollados por Symphony Enviromental Technologies, con certificación mundial antiviral, antimicrobial y antibacterial, de amplio espectro.
En cuanto a su uso, este es sumamente variado y amplio, los objetos pueden ser cosas que utilizamos diariamente en la casa, el trabajo y en lugares públicos. Sirve para la elaboración de bolsas plásticas, mascarillas, protectores faciales, todo tipo de uniformes, guantes, zapatos, pelotas, juguetes de niños y mucho más, siendo posible también colocar este aditivo en superficies con las que tenemos contacto en todo momento, tapices de cuerina, cobertores, mangos y paneles de protección para autos, buses, metropolitano, tren eléctrico, tuberías de agua de consumo humano y riego, pinturas, tintas, barnizes y muchos más, ya que los aditivos son de presentación pellet, polvo y líquido, incluidos en los procesos de extrusión, inyección, soplado y termoformado.
Para cuidar la contaminación que puede generar el deshecho incorrecto de productos plásticos, estos pueden ser biodegradables, con una vida útil controlada, a través de la adición del 1% del masterbatch d2w al momento de su fabricación, sin necesidad de hacer cambio de maquinaria o el uso de personal especializado, lo cual lo hace realmente económico y viable, sin dejar microplástico, a través de la acción celular de hongos y bacterias existentes en el medio ambiente terrestre, aéreo y marino, descontaminando el planeta.
En cuanto a la biodegradación del producto, esta se produce luego de la vida útil del producto y si escapa del reciclaje, mediante la oxidación de la cadena molecular de carbono-hidrogeno que conforman el material polimérico y sin dejar microplástico menores de 5mm de diámetro, lo cual está sustentando a través de los reportes de los test realizados por el laboratorio de acreditación internacional ISO 17025, Intertek Wilton, que demuestra que el producto plástico fabricado con masterbatch d2w, luego de un tiempo de vida útil controlado que puede variar de 18 meses a 60 meses, tiene un peso molecular de solo 3,900 daltons y los productos, para ser considerados como plásticos, deben tener un peso molecular mayor a 10,000 daltons, normalmente 40,000 a 50,000 daltons.
Por lo tanto, los residuos son un material hidrofílico (H2O), oligómeros (moléculas de bajo peso molecular) y ya no son considerados material polimérico. De esta manera, las bacterias como el Alcanivorax borkumensis, los crustáceos y lombrices de tierra se comen los oligomeros sin dejar residuos tóxicos en la naturaleza.
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