El ministro de Salud, Hernando Cevallos, no descartó hoy el cierre de las playas para el Año Nuevo, a fin de reducir el riesgo de contagio de covid-19, luego de comprobarse una alta afluencia de personas en estos espacios el último 25 de diciembre.
Aclaró, sin embargo, que eso dependerá de si las fuerzas del orden público y los municipios puedan comprometerse a controlar el aforo y las medidas de bioseguridad que eviten la propagación de la covid-19.
“La posibilidad de cerrar las playas es algo que no se descarta, pero entendemos que no es lo más adecuado. Si podemos asegurar que la Fuerzas Armadas y los gobiernos municipales puedan controlar los aforos y el no ingreso de bebidas alcohólicas entonces creo que se podría mantener la apertura de las playas porque es un lugar de esparcimiento para todas las familias”, subrayó.
Cevallos indicó que mañana, martes 28 de diciembre, representantes del Ministerio de Salud (Minsa) se reunirán con la Defensoría del Pueblo, Fuerzas Armadas y los gobiernos locales para definir si existe el suficiente personal operativo que permita el control respectivo a las playas durante las celebraciones de fin de año.
Entre las principales razones para adoptar posiblemente el cierre de las playas, dijo, se encuentran el escaso distanciamiento social, el no uso de la mascarilla, el consumo de alimentos y bebidas alcohólicas y el transporte público en el cual la gente va aglomerada convirtiéndose en un gran foco de contagio de la covid-19.
Lamentó el desborde de gente que asistió a las playas limeñas este 25 de diciembre donde, a pesar de ser un lugar abierto, la gente no respetó las medidas de bioseguridad y el personal de seguridad no pudo darse abasto para controlar el aforo a estos espacios públicos.
El titular de Salud, recordó que siguen vigentes las normas sanitarias para enfrentar el coronavirus, por lo que están prohibidas las reuniones, fiestas, circular por la vía pública sin el uso de la mascarilla o no respetar el toque de queda, y que el incumplimiento de estas disposiciones conlleva a una sanción económica.
Variante ómicron
Con respecto a la variante ómicron, precisó que la cifra oficial de infectados asciende a 71 casos, y que 3 de ellos se encuentran en Sullana, Piura, pero que no descarta que se existan más personas infectadas con esta variante en todas las regiones del país.
Agregó además que el Minsa está observando, en estos días, un incremento de ocupaciones de camas en los establecimientos de salud, lo que es bastante preocupante.
“Si hay una tercera ola de la variante delta u ómicron, nuestros servicios sanitarios con seguridad van a ser sobrepasados. Hasta el momento, en la capital tenemos varios hospitales que están por arriba del 75 % de ocupaciones de camas UCI y lo mismo sucede en algunas regiones del norte", anotó.
Hizo un llamado a la población para que siga cuidándose a fin de no contagiarse, "porque la experiencia en otros países indica que de todas maneras habrá un porcentaje de pacientes que se van a complicar”.
Vacunación en Perú
Por otro lado, dijo que el proceso de vacunación contra la covid-19 en el Perú ha logrado un avance muy importante en América Latina superando porcentualmente a Chile y Ecuador.
Sin embargo, reconoció que la gente aún no acude masivamente a colocarse su vacuna de refuerzo, lo que constituye una gran preocupación para el Minsa ya que actualmente solo se han inmunizado 3 millones 200,000 personas con la tercera dosis.
“La gran preocupación para nosotros es la dosis de refuerzo. La gente está acudiendo a vacunarse, pero no de forma masiva como quisiéramos. Nosotros aspiramos que de aquí hasta el 31 de diciembre lleguemos a los 5 millones de dosis de refuerzo, porque esta tercera dosis evita bastante que nos contagiemos con facilidad”.
En cuanto a la inmunización a los niños de 5 a 11 años, Cevallos aseguró que las vacunas para este grupo etario estarían llegando definitivamente en la primera quincena de enero del 2022, para luego proceder con su aplicación inmediata a nivel nacional.