Un total de 40 conjuntos folclóricos, tanto de danzas en traje de luces como originarias, participaron ayer de la parada y veneración en honor a la Virgen de La Merced, patrona de Juliaca. Los grupos demostraron su fe y devoción en una jornada marcada por la música y las tradiciones.
Desde tempranas horas, los habitantes de la ciudad se congregaron para asistir a la misa litúrgica celebrada en el frontis de la iglesia Santa Catalina. La ceremonia estuvo presidida por el alcalde de la Municipalidad Provincial de San Román, Óscar Cáceres Rodríguez, acompañado de autoridades locales, como el alcalde provincial de Cusco, Luis Beltrán Pantoja, y el alcalde de Cabanillas, Jesús Quispe Mamani.
Tras la misa, se llevó a cabo la tradicional procesión de la imagen de la Virgen de la Merced por las principales calles de Juliaca. La multitud de fieles, con cánticos y oraciones, acompañó con fervor el recorrido religioso.
La procesión culminó en el Templo La Merced, donde comenzó la veneración a la Virgen, considerada una de las expresiones culturales más significativas de la ciudad. La celebración estuvo llena de música y color, con la participación activa de la comunidad.
La ruta de la veneración incluyó calles emblemáticas como la avenida Tacna y los jirones Manuel Núñez Butrón, Noriega, Mariano Núñez y Moquegua. Al ritmo de danzas tradicionales como la morenada, los caporales y los tinkus, los grupos folclóricos rindieron homenaje, resaltando las costumbres y el arte de la región.
Durante la ceremonia el alcalde de San Román - Juliaca, Óscar Cáceres Rodríguez, llamó a la unidad y al trabajo conjunto, destacando la importancia de la transparencia en la gestión pública. Señaló también la necesidad de corregir errores para el bienestar de la población.
Cáceres resaltó que la celebración de la Virgen de la Merced es un momento clave para fortalecer la fe y pedir protección para la ciudad. La festividad, según indicó, es una oportunidad para que los ciudadanos se unan en torno a sus tradiciones.
La actividad concluyó con un ambiente de esperanza, fe y compromiso por parte de los pobladores de Juliaca, quienes renovaron sus promesas a la Virgen de la Merced al próximo año les mantenga con fuerza y voluntad para seguir venerando.