Los integrantes de varios sectores populares de Santa Cruz, la mayor región de Bolivia, marcharon este jueves con cacerolas vacías para exigir al Gobierno de Luis Arce medidas para frenar el incremento del costo de los alimentos, además por la falta de dólares y la escasez de combustible.
"El [precio del] arroz está por las nubes, ahora es un lujo comer un kilo de carne y no hacen nada para subsanar esta situación", declaró una ama de casa a los medios locales.
La movilización recorrió varias calles de la ciudad distinguiéndose por el ruido de los golpes de las ollas, tapas y cucharones metálicos en reclamo por el incremento de alimentos de primera necesidad como el arroz, la carne de res o de pollo.
Los protestantes, en su mayoría comerciantes, miembros de juntas vecinales, asociaciones de ancianos y mujeres, llegaron hasta la plaza principal de la ciudad sosteniendo un muñeco de trapo que llevaba un cartel que decía "ministro de economía".
El dinero no alcanza
Varias personas reclamaron porque 100 bolivianos (15 dólares) ya no alcanza para llenar una bolsa de mercado con alimentos de consumo diario, puesto que han aumentado considerablemente su precio.
"¡Basta! Gobierno incapaz", estaba escrito en algunos letreros, mientras que los gritos de las personas acusaban al presidente Luis Arce de no mostrar interés en resolver la situación económica.
Esta protesta estuvo antecedida en la víspera por una otra movilización de los maestros de Santa Cruz con las mismas características. Asimismo, en La Paz ocurrió un cacerolazo en las puertas del Parlamento por parte de grupo reducido de mujeres.
Inflación acumulada de 5.5 %
Bolivia registró en setiembre una inflación acumulada de 5.5 %, la más alta en una década, que el Gobierno consideró fue por el "contrabando a la inversa" o salida ilegal de alimentos a los mercados de los países vecinos en los que tienen un valor mayor.
Ante esto, el presidente Luis Arce instruyó la semana pasada la "militarización" de las fronteras con la finalidad de reforzar los controles que impidan la fuga de los alimentos de primera necesidad.
El Ejecutivo tomó algunas medidas progresivas desde agosto como la eliminación de aranceles a la harina de trigo para mantener el precio del pan, mientras que la semana pasada aplicó la misma acción con los artículos de limpieza e higiene personal y en la víspera con las importaciones de arroz.
Los sectores leales al expresidente Evo Morales (2006-2019) sostienen desde el lunes un bloqueo de caminos indefinido con exigencias para resolver la situación económica, aunque también sus pedidos buscan que se levanten los procesos judiciales contra el también líder del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS).
Algunos especialistas y dirigentes sociales coinciden en que el incremento de precios se debe a la falta de dólares que persiste desde el 2023 junto a la irregular provisión de combustibles.