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Beca 18: estudiante de Medicina Humana anhela tener fundación de lucha contra el cáncer

Lucero Pipa es una usuaria del programa Juntos de la región Junín

Lucero Pipa Páucar brinda servicio de voluntariado en atención para niños y ancianos en hospitales. Foto: ANDINA/Difusión

Lucero Pipa Páucar brinda servicio de voluntariado en atención para niños y ancianos en hospitales. Foto: ANDINA/Difusión

21:30 | Huancayo, oct. 11.

En el distrito de San Ramón, en la provincia de Chanchamayo, región Junín, el corazón de la selva central, vive Lucero Pipa Páucar, una estudiante usuaria del programa Juntos de 18 años, que vio muy de cerca cómo el cáncer puede cambiar la vida de las personas. Por ello, aspira a tener una fundación que pueda ayudar a quienes padecen la enfermedad y se sientan acompañados en sus peores momentos.

A su madre Nancy, de 37 años, le detectaron cáncer de tiroides en el 2013, lo cual significó un proceso de adaptación a una nueva vida porque tuvo que pasar muchas horas entre consultas médicas y tratamientos para vencer esta terrible enfermedad.

En medio de esta situación, Lucero encontró su verdadera vocación. Cuando aún cursaba la secundaria destacó por su participación en clases y logró las mejores notas y hasta algunas medallas de reconocimiento en concursos escolares. Ella ingresó al Colegio de Alto Rendimiento (COAR) Pasco, donde decide estudiar la carrera de Medicina Humana y lo logró.

Con el apoyo de sus maestros, familiares y el acompañamiento del gestor local del programa Juntos, que la orientó durante el proceso de postulación a Beca 18 del Pronabec (Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo), Lucero obtuvo en el 2013 una beca integral de estudios superiores en la Universidad Científica del Sur para estudiar la profesión que tanto deseó.

Voluntariado

“Desde pequeña siempre he querido ayudar a los demás porque he visto de cerca lo difícil que es cuando alguien padece por alguna enfermedad que le puede cambiar la vida. Cuando acabe mi carrera anhelo brindar mis servicios como profesional de la salud a las comunidades y zonas rurales que no tienen las mismas oportunidades de acceso. Quiero mejorar la calidad de vida de más personas”, comentó Lucero.

Durante sus tiempos libres hace un voluntariado en atención para niños y ancianos en diversos hospitales, lo que le permite conocer más de cerca su carrera. Sin embargo, su principal ejemplo está en su hogar; la lucha, el coraje y la fortaleza que demuestra su mamá son el impulso para que Lucero no se detenga y alcance la meta trazada.

“Caerse es parte del proceso. Si tú te caes aprendes una lección y en esta vida se aprende, se construye y se logra. Estoy muy segura de que lograré uno de mis objetivos: tener una fundación que pueda ayudar a las personas con cáncer a que luchen y puedan sentirse acompañados en sus peores momentos”, puntualizó Lucero.


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(FIN) PTM/JOT

Publicado: 11/10/2024