El legendario capo mexicano Joaquín "Chapo" Guzmán fue declarado culpable este martes de los 10 delitos de los que era acusado por liderar un imperio criminal que traficó toneladas de drogas a Estados Unidos durante 25 años, por los cuales enfrentará cadena perpetua según la ley estadounidense.
Tras el veredicto leído por el juez Brian Cogan en la corte federal de Brooklyn, el exjefe del cartel de Sinaloa, de 61 años, que vestía traje gris oscuro y camisa beige, miró a su joven esposa Emma Coronel, madre de sus hijas mellizas de siete años, sonrió levemente como para tranquilizarla y se puso la mano en el corazón.
Coronel, de 29 años, vestida con pantalones ajustados negros y una chaqueta verde, le levantó el pulgar de la mano derecha, se cruzó las manos en el pecho y le tiró un beso antes de que los alguaciles retiraran al Chapo rápidamente de la sala.
Al declararlo culpable de empresa criminal continua con fines de narcotráfico, el jurado consideró que el gobierno estadounidense probó que el Chapo era uno de los líderes del cartel de Sinaloa, que traficó al menos de 150 kilos de cocaína y que ganó más de 10 millones de dólares por el narcotráfico en un plazo de 12 meses, lo cual establece una sentencia obligatoria de cadena perpetua.
El Chapo, extraditado a Estados Unidos hace dos años, es considerado el capo narco más famoso del mundo desde la muerte del colombiano Pablo Escobar.