Es considerada una cirugía de alto riesgo debido a su complejidad, pero era la única forma de salvar a dos gemelitas que crecían en el vientre de Ana Fuentes Rivera. La asegurada de 35 años tenia 22 semanas de gestación, asistió a un control en el Departamento de Ginecología y obstetricia del hospital Rebagliati y recibió una angustiante noticia.
Tenía un embarazo gemelar monocorial, es decir, compartían la misma placenta con un potencial riesgo mortal para ambos bebes. Se diagnosticó un Síndrome de Transfusión Feto-fetal severo, complicación que se desarrolla solo en el 10% de ese tipo de embarazos y que genera que uno de los gemelos transfiera sangre de manera excesiva al otro, situación que perjudica a ambos y debe ser intervenida cuanto antes.
Teniendo 5 meses de gestación Ana Fuentes fue sometida a una cirugía fetal intrauterina de alto riesgo. El doctor Ronald Arce Villavicencio - Médico especialista en Medicina Materno Fetal del Departamento de Ginecología y Obstetricia del Hospital Edgardo Rebagliati Martins, explica el caso poco frecuente:
“Hay casos leves que se pueden controlar sin cirugía, pero también hay algunos casos severos que ameritan de una intervención quirúrgica, generalmente el riesgo de que ambos gemelos fallezcan es alto. Las pacientes que presenten esta sintomatología deben ser atendidas en hospitales de alta complejidad y con servicios que garanticen el diagnóstico y tratamiento oportuno”.
La presidenta ejecutiva de EsSalud María Elena Aguilar Del Águila destacó la amplia experiencia y preparación de los profesionales del hospital Rebagliati que realizan este tipo de complejas cirugías con resultados exitosos.
La intervención quirúrgica realizada fue una Fetoscopía con coagulación laser de anastomosis vasculares placentarias que duró 30 minutos.
“Esta consiste en introducir una camarita milimétrica (fetoscopio) al interior útero de la madre para visualizar los vasos sanguíneos placentarios que conectan a ambas bebés. Con una fibra láser se coagula o interrumpe el flujo a través de estos vasos sanguíneos para que ya no se siga trasfundiendo sangre y por lo tanto esta enfermedad no siga progresando”, explicó el especialista de Essalud tras haberse logrado que las gemelas se salven y la madre pueda continuar el embarazo con normalidad.
Ana Fuentes siguió las pautas de control del servicio de medicina materno fetal y a los 8 meses dio a luz a un par de gemelas sanas y saludables. Cabe resaltar que el instrumental utilizado es específico y especializado. El Fetoscopio es una herramienta que permite al personal médico ingresar al útero de forma milimétrica sin causar daño y la fibra laser coagula los vasos sanguíneos. Actualmente las gemelas ya cumplieron 3 meses y tienen el peso adecuado pese a ser prematuras.