Inter venció 2-1 al Urawa Red Diamonds en la segunda jornada del Grupo E del Mundial de Clubes 2025, en un partido que parecía perdido hasta los últimos minutos. Los goles argentinos de Lautaro Martínez y Valentín Carboni permitieron a los ‘nerazzurri’ mantenerse con vida en el torneo y soñar con la clasificación a octavos de final.
Cuando el reloj marcaba los 78 minutos y el Inter aún caía por 0-1, apareció Lautaro Martínez con una espectacular chilena tras un tiro de esquina para igualar el marcador y reanimar a un equipo que venía golpeado anímicamente. Poco después, en el último suspiro, Valentín Carboni, en su regreso tras ocho meses de lesión, firmó el 2-1 definitivo tras una jugada caótica dentro del área.
El juvenil argentino, formado en las inferiores del club y conocido por el técnico Cristian Chivu, reapareció por todo lo alto con un tanto que podría cambiar el destino del equipo italiano en el torneo.
Inter, forzado a reaccionar tras un mal inicio
El partido comenzó cuesta arriba para el Inter, que tuvo el dominio del balón —con más del 75% de posesión— pero fue incapaz de concretar sus opciones. En su primer ataque, Urawa Red Diamonds sorprendió con una jugada individual de Kaneko, que asistió a Watanabe para el 1-0, con una leve desviación en Darmian.
A pesar del gol en contra, el conjunto italiano no encontró claridad en ataque. Ni siquiera un potente disparo al travesaño de Lautaro logró romper el cerrojo japonés en la primera mitad. El descanso sirvió para reorganizar ideas y con el ingreso de Mkhitaryan, el Inter ganó en profundidad, aunque seguía careciendo de precisión en el último pase.
Fue recién en el tramo final cuando los europeos impusieron su jerarquía, con una combinación de garra y calidad. Primero con el golazo de Lautaro y luego con el oportunismo de Carboni, que selló la victoria sobre la bocina.
Con esta victoria, el Inter suma cuatro puntos y llegará con opciones de clasificar a los octavos de final cuando enfrente a River Plate en la última jornada del grupo. Luego de la frustración en la final de la Champions League y un irregular inicio de temporada, este triunfo supone un alivio emocional y competitivo para el conjunto de Chivu, que aún busca recuperar su mejor versión.