El primer enamoramiento, acompañado de un espectro de emociones, como la alegría, la frustración, el miedo o confusión, se suele experimentar durante la adolescencia, lo que representa una experiencia que marca la vida de un adolescente y contribuirá en la construcción de sus relaciones a futuro.
La psicóloga del Centro de Salud Mental Comunitaria Mirones Bajos, Guisela Espinoza, explica que si el adolescente es una persona con carencias emocionales puede llegar a encontrarse en situaciones riesgosas como la dependencia emocional.
“El amor es un sentimiento agradable que nace porque se valora al otro y se le acepta tal como es con defectos y virtudes. Mientras que, en la dependencia emocional se idealiza a la otra persona como alguien extraordinario sin defectos. Llegando a pensar que, por ejemplo, su pareja no tiene derecho a tener amistades o compartir con otra persona, porque eso pone en riesgo su relación. Este tipo de pensamientos generan sufrimiento y angustia” detalló.
La especialista también indicó que los padres pueden identificar estas situaciones de riesgo a través de la comunicación constante con sus hijos, practicando la escucha activa y conversando sin emitir juicios o críticas.
“Es mejor evitar iniciar las conversaciones con preguntas espía, como ¿quién es él?, ¿qué hace? Que, aunque son preguntas importantes, pueden decirse después, a medida que se va construyendo la confianza con la hija o el hijo. Es mejor empezar hablando de sus propias experiencias y enfocándose en los sentimientos. Por ejemplo, se puede conversar sobre ¿cómo se siente el primer beso? o ¿cómo se siente que alguien tome tu mano?”, sostuvo la psicóloga.
La dependencia emocional puede generar cambios emocionales constantes, llegando sentir irritabilidad, miedo, tristeza, entre otras. La especialista resaltó que es importante que los padres estén atentos y observen alteraciones en el comportamiento del adolescente, como el que deje de realizar actividades que antes disfrutaba, que se aísle en su cuarto o se enfoque solo en los aparatos electrónicos, dejando de lado su desarrollo personal y social.
Si esto continúa por más de dos semanas, la psicóloga recomienda buscar ayuda con profesionales de la salud mental, acudiendo al establecimiento de salud más cercano o comunicándose a la Línea 113, opción 5, para recibir orientación.
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(FIN) NDP/KGR
Publicado: 14/2/2025