Se aproximan las fiestas de fin de año y si todavía no has decidido adónde viajar para recibir el 2025 con las mejores buenas vibras y recargarte de energía, puedes considerar estas opciones de destinos preferidos por los viajeros peruanos. Se trata de estupendos lugares, algunos de ellos cerca de Lima.
Además del pleno disfrute de escenarios naturales, en estos destinos cercanos a la capital están garantizados la degustación de una sabrosa y variada gastronomía y también la práctica de deportes de aventura que son el bálsamo perfecto para coronar un viaje corto de fin de semana en familia, pareja y grupo de amigos.
A estas provincias de Lima se puede llegar sin dificultad por vía terrestre gracias a una red vial en buen estado y la recompensa está en sus encantadores paisajes, agradable clima y una hospitalaria población que acoge con mucho afecto a los visitantes.
A continuación, veamos cuáles son las más emblemáticas rutas turísticas cerca de Lima para celebrar las fiestas de fin de año.
Circuito turístico costa norte
Este circuito turístico comprende las provincias de Huaura, Huaral y Barranca, que albergan un conjunto de atractivos de imperdible visita.
Huaura
Quienes desean disfrutar de un ambiente pletórico de belleza natural pueden visitar la Reserva Nacional de Lachay, un área natural protegida que constituye un pequeño paraíso ubicado a 105 kilómetros al norte de Lima, en la provincia de Huaura, y ocupa un área de 5,070 hectáreas en medio de la franja desértica costera. Las lomas son un refugio para la variada fauna de la costa del Perú y una muestra representativa de la exuberante vegetación de las lomas costeras.
Este frágil ecosistema es único y su protección hace posible que se conserve una muestra representativa de las lomas costeras y fomenta el aprovechamiento racional de estos recursos. La Reserva ofrece la posibilidad de pernoctar en sus instalaciones y de pasar un día agradable pues presenta la infraestructura para albergar a los visitantes (mesas, parrillas, servicios higiénicos, parqueo y otros).
En el kilómetro 150 de la Panamericana Norte, se ubica el distrito de Santa María, en la provincia de Huaura. El lugar es un extenso paraíso natural, de frondosos bosques, majestuosos humedales, así como una reconocida y envidiable gastronomía, que conviven con el misterio de los curanderos ancestrales, y el fervor religioso de su gente.
Santa María posee un microclima incontrastable, enclavada en la margen izquierda del río Huaura, de quien toma sus aguas para irrigar su fértil tierra. Es un lugar propicio para el descanso, de amplios parajes sin ruidos y hermosos paisajes donde el color verde es predominante, con todavía algunas casonas levantadas de adobe y carrizo que acoge en su mayoría a gente sencilla y trabajadora.
La gastronomía en esta provincia enamorará a los turistas con platos emblemáticos como el ceviche de pato, arroz con pato, sopa huachana, charquicán de anchoveta, desayuno huachano, alfajores y dulces de Sayán, entre otros potajes sabrosos.
Si Alemania ostenta su célebre “salchicha de Frankfurt”, el Perú tiene en la “salchicha huachana” a uno de sus embajadores gastronómicos que cautivan paladares en desayunos, almuerzos y cenas. La salchicha huachana se prepara con carne de cerdo molida, grasa de cerdo, zumo de naranja agria y condimentos (pimienta molida, comino, sal, ajo molido, achiote rojo y amarillo). Una vez mezclados estos ingredientes se envuelven en tripa natural de cerdo debidamente limpia.
Huaral
La provincia más cercana a la ciudad de Lima nos ofrece notables atractivos como el Museo Municipal de Chancay, recinto cultural inaugurado el 23 de julio de 1991, y su primera exposición con la temática de la cultura Chancay se lanzó el 9 de diciembre de ese año.
Con el tiempo este museo se ha convertido en uno de los principales centros de difusión cultural del norte chico, a la vez de consagrarse como uno de los recursos turísticos más representativos de toda la provincia de Chancay. A través de sus colecciones, el museo ofrece una experiencia donde converge el pasado y el presente, embarcando al visitante en una aventura por la historia de Chancay y el norte chico.
En su interior se exhiben textiles de la civilización Chancay, representaciones de sus actividades productivas como la agricultura y la pesca, su arquitectura y vida cotidiana. Otros tópicos de exhibición tienen que ver con el hundimiento del navío chileno Covadonga durante la Guerra del Pacífico, expresiones de la religiosidad en Chancay, así como manifestaciones culturales en la actualidad.
Un atractivo de ineludible visita es el Castillo de Chancay, localizado en la calle Primero de Mayo del distrito costero de Chancay. Se trata de una majestuosa edificación catalogada como “Parque temático multicultural”. Está construido en la década de 1920 sobre un acantilado rocoso, a orillas del zócalo continental del Océano Pacífico.
En su interior se han habilitado ambientes especiales como el “Museo de la cultura Chancay”, que alberga la colección museográfica privada más importante de dicha cultura prehispánica. Asimismo, destaca un Museo de Historia Natural, que contiene una de las colecciones más grandes del país de animales disecados bajo la técnica de la taxidermia.
Finalmente, se puede apreciar el “Salón de los recuerdos”, donde se exhiben antigüedades de la familia que construyó el Castillo de Chancay, entre ellos algunos de los muebles diseñados por la fundadora, doña Consuelo Amat y León, quien vivió en este predio desde sus inicios.
Durante sus más de 30 años de funcionamiento como destino turístico de obligada de visitar en el norte chico, el Castillo de Chancay ha obtenido diferentes reconocimientos como el de Centro Cultural y Recurso Turístico del Perú, por parte del Mincetur en el año 2002, y también “Embajador de la Marca Perú” por parte de Promperú desde el año 2012.
En Chancay también pueden visitarse la encantadora plaza de Armas, sus iglesias, santuarios y museos históricos, así como el puerto pesquero.
Si se desea disfrutar de una experiencia plena de tranquilidad y espiritualidad hay que visitar el Eco Truly Park, una hermosa y apacible comunidad ecológica, artística y autosostenible, donde residentes y voluntarios conviven en armonía con la naturaleza. Se ubica a la altura del kilómetro 19.5 del serpentín de Pasamayo, en el distrito de Aucallama.
Esta finca ecológica destaca por sus singulares construcciones de forma cónica y ovalada de inspiración cultural oriental hechas con adobe y otros materiales naturales amigables con el medioambiente y que se integran al espacio costero próximo al mar donde se encuentra la comunidad llamada “Eco aldea”.
En Eco Truly Park los visitantes pueden participar en actividades sostenibles como la agricultura orgánica, eco construcciones, turismo sustentable, clases de yoga, retiros espirituales y de meditación, arte oriental, entre otros.
Visitar este atractivo de Huaral también constituye una buena oportunidad para conocer personas de todo el mundo que constantemente visitan e intercambiar experiencias en el Eco Truly Park.
Para los amantes del turismo arqueológico y cultural existe Rúpac, imponente complejo arqueológico, llamado el Machu Picchu de la sierra de Lima, está ubicado en lo alto de una gran montaña en el distrito de Atavillos Bajo, a 3,580 metros sobre el nivel del mar. Debido a esta localización se le conoce también como la “Ciudad entre las nubes”.
Esta impresionante ciudadela, con edificaciones de hasta diez metros de altura, hechas íntegramente en piedra y ubicadas en las partes más altas de la montaña, se adjudica a los Atavillos, una cultura preincaica que floreció entre los 1,200 y 1,600 años después de Cristo.
Según investigaciones arqueológicas realizadas, sus habitantes tuvieron una fuerte influencia religiosa y militar, demostrada en los vestigios de aparentes cementerios y templos encontrados en el lugar, así como en la situación del complejo, que permitía un control total de la zona.
Los Atavillos habrían sido conquistados por el inca Pachacútec y sus riquezas eran tales que el conquistador español Francisco Pizarro las habría reclamado en posesión para el rey de España, autodenominándose el marqués de los Atavillos.
Por su importancia como herencia material ancestral y factor de identidad regional, este sitio arqueológico fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación, el 25 de junio de 1999. Asimismo, el Congreso de la República lo declaró patrimonio turístico de interés nacional prioritario en 2017.
Para llegar a Rúpac desde la ciudad de Lima hay que viajar hasta la provincia limeña de Huaral y a partir de allí tomar un desvío de 75 kilómetros para llegar a la localidad de Pampas, lugar donde se inicia el ascenso hacia el sitio arqueológico.
Además de estos cautivantes atractivos turísticos, la provincia de Huaral nos brinda la posibilidad de saborear una deliciosa y variada gastronomía con platos emblemáticos como chancho al palo, pato al ají, chicharrón de conejo, trucha frita, entre otras delicias que motivan a volver a este bello destino más de una vez.
Barranca
En esta provincia limeña destaca como uno de sus más notables atractivos la Ciudad Sagrada de Caral, ubicada a 206 kilómetros al noroeste de Lima y que las investigaciones arqueológicas establecieron que esta urbe, construida hace más de 5,000 años, es la más antigua de Perú y de América, contemporánea con Mesopotamia, Egipto, India, China y Mesoamérica.
Caral representa el origen de la cultura andina y la Unesco la declaró el junio de 2009 como Patrimonio Cultural de la Humanidad. El complejo urbanístico está formado por varias construcciones, entre las que resaltan seis pirámides y sus plazas circulares. Por los instrumentos y restos encontrados hasta la actualidad se conoce que sus habitantes se dedicaron principalmente a la pesca y agricultura.
Otro monumento importante es la Fortaleza de Paramonga, complejo arqueológico de origen Chimú y luego fue ocupado por los incas. Su principal edificio es la fortaleza, construida sobre un amplio promontorio rocoso. Constituye una pirámide de estructuras de adobe formada por cuatro plataformas macizas con recintos en la parte superior.
La Plaza de Armas de Barranca rinde homenaje a la ciudad sagrada de Caral y allí se encuentra la Parroquia San Ildefonso de arquitectura neocolonial. y tiene un paisaje hermoso y una gran estatua.
También resalta entre sus atractivos el Cristo Redentor, imponente escultura de 20 metros de alto hecha de concreto y pintada de color blanco. Se ubica en lo alto del cerro colorado, rodeada por un mirador desde donde se puede apreciar las hermosas playas de la ciudad.
Asimismo, sobresale la Casa de las Brujas, predio de huéspedes de Paramonga construida en 1920, propiedad de la familia Canaval. En 1923 pasó a propiedad del consorcio Grace y fue usado para dar hospedaje a los antiguos funcionarios de la hacienda. Su construcción de estilo europeo, edificado con quincha y madera, cuenta con cuatro pisos, una portada principal, un vestíbulo, sala y baño.
Barranca es muy conocida por su Circuito de Playas, conformado por playas de distintas características. Al norte se encuentran Chorrillos, Miraflores y Puerto Chico; al sur El Colorado, Bandurria y Atarraya.
También destaca la playa La Isla, conocida también como la “Isla del Faraón”, que invita a un baño refrescante en su apacible mar. Además de su belleza natural, tiene un gran cerro de arena de forma piramidal que ingresa al mar dividiendo la playa en dos: el lado norte, que es poco frecuentado; y el lado sur, zona preferida de los bañistas porque cuenta con un mar tranquilo y de olas pequeñas.
En la parte posterior de la isla, la erosión del mar y del aire sobre las rocas ha formado pequeñas pozas de agua marina. Se ubica a 10 minutos, aproximadamente, de Supe Puerto.
La culinaria de Barranca encanta paladares gracias a la amplia variedad de insumos procedentes de su ubérrimo valle y del mar que baña su litoral, rico en especies hidrobiológicas, así como a la sazón de sus cocineras y cocineros herederos de una tradición gastronómica milenaria enriquecida con el aporte cultural afroperuano, europeo y asiático.
Uno de los potajes emblemáticos de la provincia de Barranca es el tacu tacu, potaje nacido de la mezcla armoniosa del arroz traído por los inmigrantes asiáticos con el frijol oriundo del Perú y de diversos tipos, se convierte en un solo cuerpo gracias a los acrobáticos saltos que protagoniza sobre la sartén y el fuego intenso que manejan experimentados cocineros.
Si bien puede saborearse solo, la tradición gastronómica maridó al tacu tacu con todo tipo de acompañamientos: desde el humilde huevo frito hasta salsa de mariscos, pescado frito, sábana de lomo, lomo saltado, a lo pobre (con plátano y huevo fritos), malaya frita, y sigue una lista interminable incrementada por la creatividad de los cocineros peruanos.
La oferta culinaria en Barranca incluye a platos a base de pato, cerdo y cuy, animales de crianza hogareña que también son protagonistas en otras provincias del Perú, así como a los pescados y mariscos que suelen presentarse en cebiche, sudados, fritos, en guisos, sopas, rellenos, entre otros tipos de preparación.
Otras preparaciones que suelen deleitar a los comensales son el “meneado de pavo”, un guiso elaborado a base de pavo (aunque también se puede utilizar carne de pollo o pato) aliñado con ají panca, maíz blanco molido y cocinado con manteca de cerdo. Va acompañado de yucas sancochadas. Debe su singular nombre a que es preparado en grandes ollas, en las que se tiene que mover (“menear”) constantemente hasta que tome sabor, color, aroma y consistencia.
También destaca la “sopa supana”, una tradicional sopa elaborada con menudencia de gallina y pava, presas de pavo, pan francés, huevo y aceitunas; así como el “picante de cangrejos”, preparado con cangrejos, ají panca y el ají amarillo o “escabeche”.
Y por tratarse de una provincia con amplio litoral y mar pródigo en recursos hidrobiológicos, en Barranca se puede degustar sabrosos ceviches, escabeches, parihuelas, frituras y sudados a base de diversos tipos de pescado y mariscos.
La travesía gastronómica culmina con postres que atrapan a los paladares más exigentes, como los “alfeñiques” o "melcocha", dulce tradicional y de rústica elaboración, que consiste en una masa elaborada con miel de caña de azúcar, mezclado con jugo de naranja y de limón. Al final se le agrega trozos de maní.
A este abanderado de los dulces en Barranca se suman los buñuelos, los alfajores, los turrones, los higos rellenos, entre otros.
Esta maravillosa oferta gastronómica se acompaña con tradicionales bebidas como la chicha de maíz en sus diversas variaciones, así como con vinos y pisco, el patriótico destilado de bandera oriundo del Perú.
Circuito costa sur
Este circuito está constituido por la provincia de Cañete, un destino con importantes atractivos turísticos que enamoran a los visitantes.
Cañete
Este circuito está constituido por la provincia de Cañete, un destino con importantes atractivos turísticos que enamoran a los visitantes.
Un destino formidable en esta provincia es San Vicente de Azpitia, perteneciente al distrito de Santa Cruz de Flores, provincia de Cañete, que goza de una excelente ubicación con una incomparable vista del río Mala. Allí se puede practicar actividades al aire libre como ciclismo de montaña, trekking y excursiones a caballo, además es el lugar ideal para pasar unos días de relax en familia o con amigos.
Para llegar a Santa Cruz de Flores y Azpitia, hay que recorrer la Panamericana Sur hasta el kilómetro 80, a la altura de la playa León Dormido, y luego tomar el desvío por debajo del túnel que lleva al pueblo de San Antonio.
A continuación, se debe tomar el desvío hacia la izquierda, y conducir hasta el distrito de Santa Cruz de Flores, y continuar el camino de trocha carrozable hasta llegar a San Vicente de Azpitia. Su tranquila campiña rodeada de frutales como manzanos, lúcumos, pacaes, paltos, y su magnífica vista del valle del río Mala, son su principal atractivo.
Para los amantes del turismo de aventura al aire libre, Lunahuaná es el destino por excelencia en Cañete. Uno de los más populares es el canotaje y la actividad más común es el canopy o tirolesa.
Además, puedes realizar paseos a caballo, bicicleta y cuatrimoto en los alrededores de Lunahuaná. También se puede degustar una sabrosa y variada gastronomía donde destacan potajes como la carapulcra, la sopa seca y diversos platos a base de camarones.
Circuito sierra norte
Las provincias de Cajatambo y Oyón componen un cautivante circuito en la sierra norte del departamento de Lima, donde es posible apreciar la imponente belleza de la Cordillera de los Andes centrales, lagunas y valles de seductora belleza.
Cajatambo
La provincia de Cajatambo, ubicada al noreste de Lima y en las nacientes de la Cordillera Blanca, brinda la oportunidad de conocer o volver a visitar el nevado de Yerupajá, la laguna de Viconga, el nevado Shirishanca, el sitio arqueológico de Chiraumarca, así como la zona reservada en la cordillera de Huayhuash.
Quienes lleguen a esta provincia podrán degustar el pari o sopa a la piedra, la huatia de Calabaza, el picante de cuy, la pachamanca, entre otros platos tradicionales elaborados con insumos de la zona.
Oyón
Entre los atractivos turísticos de la bella provincia de Oyón podemos mencionar al nevado Santa Rosa, que se encuentra formando parte de la cordillera de Raura, hacia el norte de Oyón. Tiene una altura de 5,150 metros. También destacan la laguna Surasaca, que forma parte de diferentes circuitos de caminata a campo traviesa o trekking por la cordillera Raura.
El complejo arqueológico de Yarosh es una ciudadela preincaica en la que destaca una plazoleta principal que alcanza cerca de cuatro kilómetros.
El termalismo en Oyón tiene como máximos exponentes a los baños termales de Churín, ubicados en el distrito de Pachangara. En el sitio se reconocen los baños denominados “de la Juventud”, “de los novios”, “del Señor de los Milagros”, “de Mama Warmi”, “de Santa Rosa”, entre otros. Estos ayudan a combatir enfermedades de la piel, hepáticas, respiratorias, nerviosas, renales y reumáticas.
Asimismo, resaltan los baños termales de Tingo, localizados en el distrito de Andajes. Las aguas de estas fuentes termales varían entre los 32°C y 36°C.
En Oyón existen además otros atractivos turísticos como el Camino Inca, los complejos arqueológicos de Quillawaca, de Marca Marca, de Gallán, entre otros.
Circuito turístico sierra central
Este circuito turístico del departamento de Lima está representado por la provincia de Huarochirí que nos espera con sus imponentes cataratas y toboganes naturales, así como coloridas localidades pletóricas de riqueza cultural y deliciosa culinaria típica.
Huarochirí
Huarochirí, provincia ubicada en la parte central y oriental del departamento de Lima, es un destino que ofrece diversos microclimas, los cuales se acentúan en relación a la altitud, y donde existen diversas cataratas ubicadas en esta cuenca como Palakala y Antakallo.
Asimismo, destacan los toboganes de Songos, que se ubican en la localidad del mismo nombre, en el trayecto hacia el distrito de Surco y a la altura del kilómetro 63 de la carretera Central. El atractivo del lugar son las formaciones rocosas que conforman toboganes naturales por donde discurre el agua procedente de la laguna Linday.
Esta provincia de la sierra limeña ofrece diversas posibilidades a los visitantes, tales como conocer el poblado de Antioquia, en donde se puede admirar sus paredes blancas decoradas con figuras mitológicas y de fabulas, que dan una apariencia de estar dentro de un cuento de hadas. Asimismo, se ofrece una variada oferta gastronómica y agropecuaria en la que destacan la palta fuerte de Santa Eulalia y la chirimoya de Callahuanca y Cumbe.
Otros atractivos que se puede descubrir o volver a disfrutar en Huarochirí son el distrito de San Mateo de Otao, convertido en un destino ideal para disfrutar en familia dado que ofrece no solo hermosos paisajes y cataratas, sino que ha incorporado atractivos para el turismo de aventura como el puente y la bicicleta extremos, donde es posible realizar un recorrido a más de 80 metros de altura con todas las medidas de seguridad.
También ofrece el “teleférico de San Mateo de Otao”, que consiste en un huaro o canastilla metálica movilizada por cables de acero, donde pueden viajar hasta cuatro personas y trasladarse de una montaña a otra a más de 100 metros de altura y apreciar en el trayecto la belleza paisajística del valle interandino.
Existe también un mirador en forma de mano abierta en el que los visitantes de todas las edades pueden ubicarse en la palma y registrar fotografías de recuerdo con una impactante vista del valle de San Mateo de Otao. La visita a este destino se completa con la suculenta gastronomía local en la que destacan la pachamanca, platos a base de trucha y cuy, chancho al palo y a la caja china, entre otros, así como saborear deliciosas chirimoyas y paltas, frutos emblemáticos del lugar.
Circuito sierra sur
La sierra sur tiene en la provincia de Yauyos a su exponente protagónico que nos brinda una filigrana de lugares de gran belleza natural y biodiversidad, así como enorme patrimonio cultural expresada en la producción artesanal de sus comunidades.
Yauyos
La provincia de Yauyos se encuentra ubicada al sureste del departamento de Lima y tiene como principal atractivo la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cochas, que cuenta con un mosaico natural formado ríos, cataratas, lagunas, cañones y nevados. También se puede apreciar abundante variedad de flora y fauna silvestre que adorna la parte norte y noreste de la provincia.
Entre los atractivos de esta provincia destacan las andenerías de Laraos, el Bosque del Amor en Vilca, las lagunas de Cochacocha y Piquecocha, el mirador de Huallugina, el puente Centenario de Vilca, entre otros.
El apetito será bien retribuido con potajes emblemáticos como el churpucuy (cuy frito que se sirve con maíz y habas), el chilcano de trucha, la pachamanca, el bisté de alpaca y el queso con papas, entre otros.
Playas de ensueño
Las playas son el escenario ideal para celebrar las fiestas de fin de año. Y el litoral peruano, con sus más de 3,000 kilómetros de extensión, tiene balnearios paradisiacos donde es posible disfrutar a plenitud del sol, la arena y el mar.
Se trata de lugares idóneos para el descanso, la recreación y la práctica de deportes náuticos que garantizan una experiencia imborrable en verano, la estación preferida por todos. Si bien las playas de la costa norte son las preferidas por su cálido mar, sol permanente y paradisiacos paisajes, la costa centro y sur del país también albergan balnearios de extraordinaria belleza paisajística, excelentes olas para practicar deportes náuticos, importante fauna y suculenta gastronomía que animan a visitarlos y atesorar recuerdos inolvidables.
A continuación, repasemos algunas de las playas y balnerarios del litoral peruano ideales para celebrar las fiestas de fin de año.
Costa norte
Máncora
De aguas tibias, excelente sol y olas perfectas para la práctica del surf, Máncora es una de las playas preferidas para los amantes de los deportes náuticos y del descanso reparador.
Este balneario se encuentra localizado en el distrito de Máncora, en la provincia piurana de Talara, a una distancia de 150 kilómetros al noroeste de la ciudad de Piura. El acceso a Máncora se da por carretera a través de la carretera Panamericana Norte, con transporte regular de buses y vehículos de turismo. El acceso aéreo se da básicamente por los aeropuertos de Piura y Tumbes.
Su creciente fama como paradisiaco destino llevó a Máncora a ser elegida como mejor destino de playa de Sudamérica, en los prestigiosos premios Word Travel Awards edición 2016, conocidos como los premios Óscar del Turismo.
Lobitos
Es otra hermosa playa, ubicada a solo 18 kilómetros de la ciudad de Talara, la cual es famosa por poseer la ola izquierda más grande de Sudamérica, por lo que es preferida por los amantes de la tabla hawaiana.
Su buen oleaje permite la practica de diversos deportes náuticos como el esquí acuático, el kayak, la motonáutica y la pesca deportiva.
Punta Balcones
Es otra encantadora playa cercana a la ciudad de Talara, ubicada en el límite con la playa y el salar de Negritos, y que destaca por ser un lugar ideal para realizar campamentos. Además, sus cálidas aguas y olas son óptimas para la práctica del surf y la pesca deportiva.
Negritos
Este maravilloso lugar se encuentra a solo 10 minutos al norte de la ciudad de Talara y destaca por poseer una capa de sal que cubre la superficie y que le confiere el color blanco que destella cuando recibe los rayos del sol.
Este salar, de momento el único conocido en la costa norte peruana, se forma cuando la marea baja y el calor del sol evapora el agua, dejando expuesta la sal que esta contiene. Al combinarse con la arena y porciones de agua que demoran en evaporarse se forma una vasta capa de color blanco que invita a registrar el salar en inolvidables imágenes.
Vichayito
Es otra de las bellas playas de la región Piura y se encuentra ubicada a 13.6 kilómetros al sur de la playa de Máncora, en la provincia de Talara.
Gracias a sus tibias aguas y buenas olas aptas para los deportes náuticos, así como la importante inversión hotelera en la zona, este balneario se ha convertido en uno de los destinos preferidos por los surfistas, para la práctica del buceo, y para quienes buscan un lugar acogedor para descansar y reparar energías.
Colán
Ubicada en el distrito del mismo nombre, en la provincia piurana de Paita, Colán es, sin lugar a dudas, una de las playas favoritas de esta parte del país dado que goza de un intenso sol durante todo el año, así como un limpio mar, donde es posible ver el fondo arenoso de la playa y un entorno bastante moderno y rico en establecimientos de hospedaje que brinden las mejores atenciones a los visitantes.
Playa Colán es conocida también como “La Esmeralda”, dado que el mar se caracteriza por su ligero color verduzco que embellece más el paisaje y que contrasta con la arena clara de su playa. El mar que baña el litoral es ideal para la práctica de distintas actividades náuticas como el windsurf, deporte que convoca a visitantes extranjeros durante el año. Otro deporte que atrae en Colán es el surf, gracias a la presencia de las largas olas de su mar.
Cabo Blanco
Se encuentra a la altura del kilómetro 1137 de la Panamericana Norte, en la región Piura. El material de la playa es arena fina y un mar rico en especies hidrobiológicas, por lo que es ideal para la pesca. Su belleza impactó al memorable escritor estadounidense Ernest Hemingway, quien la convirtió en escenario de su célebre novela “El viejo y el mar”.
Debido a sus olas grandes y tubulares, es ideal para los amantes del surf, aunque son catalogadas como "solo para expertos". Desde Cabo Blanco se puede partir hacia alta mar para observar el tránsito de las ballenas jorobadas, actividad que se ha convertido en un importante atractivo turístico en la costa norte peruana.
Los Órganos
Ubicada a la altura del kilómetro 1153 de la Panamericana Norte. Su clima es tropical y con buen clima todo el año. Tiene un muelle artesanal, con balsas de vela blanca. Después del muelle hay una punta llamada Veleros, que tiene una bonita vista sobre el mar.
En las cálidas aguas de Los Órganos se puede observar a una importante población de tortugas marinas que se han convertido en un atractivo para el ecoturismo. Posee un clima cálido tropical con una temperatura promedio de 29°C con máximo de 35°C en la estación de verano.
Huanchaco
Ubicado a poco más de 20 minutos de la ciudad de Trujillo, el balneario de Huanchaco, en el distrito del mismo nombre, es el destino ideal para los amantes del surf y para aquellos que quieren disfrutar de los mejores platos marinos de la gastronomía peruana.
Se caracteriza por la presencia de los emblemáticos Caballitos de totora, embarcaciones construidas artesanalmente con totora, una fibra vegetal que crece en humedales cercanos y que es utilizada desde tiempos ancestrales para las faenas de pesca. Estas embarcaciones surgieron con la civilización mochica, que se desarrolló entre los siglos II y V d.C. y era el principal medio de transporte para los pescadores que extraían los ingentes recursos hidrobiológicos del biodiverso mar peruano.
Pacasmayo
Ubicado a una hora y media en auto desde la ciudad de Trujillo, Pacasmayo es conocido por sus majestuosas playas de atardeceres multicolores, su restaurado malecón, casonas de estilo republicano y deliciosa gastronomía marina, por lo que se ha convertido en un pequeño paraíso para las parejas y familias.
Una de las playas más emblemáticas es El Faro, famosa por tener la ola navegable más larga del mundo, lo que atrae a los amantes de los deportes acuáticos de todos los rincones del mundo.
Puerto Malabrigo
Es un balneario emblemático de la región La Libertad, localizado en el distrito de Rázuri, provincia de Ascope, a 70 kilómetros al norte de la ciudad de Trujillo.
Es considerado un "paraíso” para los tablistas de todo el mundo, dado que posee las olas izquierdas perfectas más largas del mundo. Se trata de olas tubulares de un promedio de 1.5 kilómetros de largo que no superan los 2.5 metros de altura en los días más favorables para el surf.
Pimentel
Es el balneario más concurrido de la provincia de Chiclayo, en la región Lambayeque. La popularidad del balneario recae tanto en la playa que posee, como en la diversidad de actividades que se pueden practicar allí. Las olas del balneario de Pimentel son aptas para el surf, por lo que este tipo de deportistas suelen visitarla durante todo el año.
El muelle que posee permite abordar diversos tipos de embarcaciones para navegar por las aguas del balneario. La infraestructura turística de este balneario ha sido notoriamente modificada, de tal forma que actualmente cuenta con un atractivo malecón donde hay áreas de paseo y puestos de venta de artesanía regional. En las inmediaciones existen restaurantes donde se puede degustar lo mejor de la gastronomía lambayecana.
Costa central
En la costa central y específicamente en el litoral de la región Áncash destacan los encantadores balnearios de Tortugas, ubicada en la provincia de Casma, Vesique, El Dorado, El Enrocado y Los Chimús pertenecientes a la provincia del Santa. Todos están aptos en términos de salubridad para recibir bañistas durante este verano, según confirmó la autoridad sanitaria regional.
En Lima Metropolitana los bañistas pueden acudir a las playas de los distritos de Miraflores, Barranco y Chorrillos que están en condiciones de recibir veraneantes. Más al sur destacan los distritos balnearios de Punta Hermosa y Punta Negra, así como la provincia de Cañete con su emblemático balneario de Cerro Azul.
Costa sur
En la costa sur la región Ica ofrece las hermosas playas habilitadas de la Reserva Nacional de Paracas como Yumaque y La Mina, cubiertas con fina arena y bañadas por olas apacibles.
En Arequipa, las hermosas playas de La Punta, Mejía y Catarindo en la provincia de Islay; el balneario de Jihuay en la provincia de Caravelí, considerado un paraíso para los amantes de los deportes náuticos; así como la caleta San José en la provincia de Camaná, que destaca por sus aguas tranquilas y su espectacular puesta del sol.
El departamento de Moquegua, en su provincia litoral de Ilo, alberga playas de enorme belleza como Gentilares, La Glorieta, Tres Hermanas, Peña Blanca, Pozo de Lizas y Puerto Inglés.
Finalmente, en Tacna, el departamento más austral del Perú, posee un conjunto de playas de fascinante belleza paisajística y mar calmo, como Boca del Río, Los Palos, La Lancha, Pozo Redondo, Cánepa, Vila Vila, Tres Cruces, Punta Colorada, Las Gaviotas, Tomoyo y Los Hornos.
(FIN) LZD/MAO
JRA
También en Andina: