Son varias las ciudades, sobre todo andinas, que lo tienen como patrón y le rinden homenaje con bien organizadas celebraciones, resultantes del sincretismo cultural y religioso.
Cusco
En la “capital histórica del Perú” se experimenta una verdadera manifestación religiosa durante la fiesta de San Sebastián, el santo patrón del distrito del mismo nombre de la Ciudad Imperial.
Los fieles deben madrugar para no perder ninguna actividad. La fiesta empieza con la tradicional misa que se celebra a las seis de la mañana. A esa hora la iglesia de San Sebastián ya se encuentra abarrotada. En la homilía, que se realiza en quechua, participan también las autoridades locales.
Luego de la ceremonia religiosa se realiza la procesión por las principales calles del distrito. Cargan las andas los miembros de la hermandad, unas 120 personas, todos hombres. Para ser integrantes de ella tienen que jurar fidelidad absoluta y cumplir con algunos requisitos.
El anda es una de las más pesadas, tiene cuatro brazos y para cargarlo se necesita de 60 hombres. La particularidad de esta procesión es que los hermanos caminan descalzos.
Más de veinte danzas tradicionales de la zona y de otras jurisdicciones se interpretan durante la festividad. Los bailes que se interpretan son: qollas, siqlla, qhapaq negro, auqa chileno, contradanza, coyacha, mistiza coyacha, chunchachas, majeños, saqra, misti qanchi, qhapaq ch’unchu, entre otros.
Para los que buscan disfrutar de una buena comida, no falta el festival gastronómico. Aquí se ofrecen el chiriuchu, lechón, adobo, chicharrón de cuy, entre otros. También se efectúan corridas de toros.