Mientras la sociedad y las empresas en su conjunto continúan afrontando los impactos de la pandemia por el coronavirus, los expertos ya prevén la próxima gran crisis global: el cambio climático.
En esa perspectiva, la directora de nexos+1, Marian Buraschi, recomienda aprovechar todo lo aprendido en esta emergencia sanitaria.
Afirma que con la disminución de contagios y la reactivación económica se puede observar una luz al final de la crisis por el covid-19 en nuestro país.
“Pero ante un previsible cambio climático, la pandemia nos ha dado una mirada real de la importancia de preservar el entorno donde vivimos y donde desarrollamos actividades económicas”, manifestó.
Por aprender
En esa línea, la directora de nexos+1, plataforma que promueve acciones contra el cambio climático desde el sector privado, comenta que si bien hay mucho por aprender es importante capitalizar todas las lecciones que nos está dejando la emergencia sanitaria de cara al futuro.
La especialista nos sugiere cinco aprendizajes clave:
- La prevención cuesta menos que la reacción. Un estudio de la Universidad de Boston señala que la pandemia podría terminar costando casi 16 billones de dólares a escala mundial, 500 veces más de lo que habría costado tomar las medidas necesarias para prevenirla, explica.
Según Buraschi, lo mismo sucede con la inversión en mitigación y adaptación al cambio climático, ya que retrasar las acciones climáticas 10 años más aumentarán más de tres veces su costo en el futuro, de acuerdo al estudio “El costo de retrasar la acción para frenar el cambio climático”.
- Escuchemos a la ciencia. El covid-19 y el cambio climático evidencian el impacto de no escuchar las advertencias de los especialistas.
“La ciencia nos demanda mantener el calentamiento global por debajo de 1.5 grados centígrados. Esto requiere llegar al 2050 con un mundo con cero emisiones netas de carbono”, dijo.
Explicó que, de acuerdo con la NASA, si la temperatura global se incrementa en dos grados centígrados, entre 184 millones y 270 millones de personas estarán expuestas a escasez de agua.
- Todo impacto en la biodiversidad nos afecta. Tal como se presume que pasó con el covid-19, el 75% de las enfermedades nuevas provienen de los animales que se desplazan de sus hábitats naturales a zonas urbanas, advirtió la directora de nexos+1.
Asimismo, la experta manifestó que la conservación de la biodiversidad está intrínsecamente ligada a la lucha contra el cambio climático.
Ello se debe a que la deforestación y el cambio de uso de suelo generan un 40% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, y representa un 47% de las emisiones en el Perú.
-La concertación es vital. Ello permite alcanzar los objetivos esperados y, con ello, afrontar mejor el cambio climático y todos los desafíos que ello implica.
Buraschi explica que cuando tuvimos que afrontar la pandemia, las personas y las empresas dieron un paso al frente, recordándonos la capacidad de resiliencia humana y su gran aporte.
El cambio climático también necesita de estas sinergias. Si las personas, las empresas y los gobiernos se unen pueden resolver problemas comunes en menos tiempo, con menos costo y con más impacto, asegura la experta.
-La innovación empresarial es indispensable. En la pandemia se aceleró el desarrollo de soluciones innovadoras, desde aplicaciones para combatir la propagación del virus, hasta tecnologías para el teletrabajo.
En el caso del cambio climático, explica que la innovación empresarial también es clave para reducir las emisiones de carbono.
“En nexos+1 hemos visto innovaciones, como la de Textil del Valle que ve la circularidad como una fuente de nuevos negocios. Ellos producen prendas y frazadas nuevas a base de 20% de fibras de tela reciclada y 80% poliéster de botellas de plástico”, comenta.
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(FIN) SDD
JRA
Publicado: 16/11/2020