Una situación alarmante ocurrió esta mañana en el nuevo centro de salud de San Juan Bautista, en la provincia de Huamanga, región Ayacucho, cuando una mujer en labor de parto quedó atrapada dentro del ascensor del establecimiento el cual aún se encuentra en proceso de entrega y habilitación.
La gestante, que era trasladada por personal médico al área de Ginecología ubicada en el tercer piso, tuvo que ser evacuada de manera improvisada luego de que el ascensor, tipo montacamilla, no llegara al nivel requerido.
El incidente sucedió en la madrugada de hoy martes 24 de junio generando tensión entre los trabajadores y usuarios, quienes expresaron su preocupación por el estado de los equipos médicos y la infraestructura del establecimiento.
Otros señalaron que, pese a tratarse de un centro recientemente inaugurado, la falta de mantenimiento y supervisión pone en riesgo la vida de los pacientes. “No es posible que situaciones como esta se normalicen”, indicaron.
Ante la gravedad del hecho, la Segunda Fiscalía Provincial Especializada en Prevención del Delito de Huamanga, a cargo de la fiscal Carmen Rosa Portugal Vivanco, intervino en el lugar como parte de una diligencia preventiva para verificar el estado de los ascensores, tanto en el Hospital Regional de Ayacucho (HRA) como en el nuevo centro de salud de San Juan Bautista.
Durante su visita, la fiscal confirmó que el ascensor siniestrado se encuentra actualmente fuera de servicio y en mantenimiento.
De igual manera, el personal del centro refirió que aún no se ha emitido el informe oficial, aunque se presume que la falla se habría debido a un error técnico o humano.
Desde la gerencia de dicho establecimiento informaron que la
infraestructura fue entregado parcialmente, y que comenzó a operar hace aproximadamente dos meses, por lo que aún está en proceso de implementación y supervisión.
Por su parte, la fiscal Portugal Vivanco exhortó a las autoridades responsables a garantizar el funcionamiento seguro y eficaz de los equipos médicos y de transporte, subrayando la necesidad de priorizar la seguridad de los pacientes, especialmente en áreas críticas como ginecología y emergencias.