El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó hoy un decreto por el que se prohíbe sacar del país más de 10,000 dólares en efectivo o su equivalente en otras divisas, entre otras medidas para garantizar la estabilidad financiera del Estado.
Además, el decreto establece una serie de restricciones a los residentes para operaciones con extranjeros vinculados con "países que adoptan acciones inamistosas contra ciudadanos y personas jurídicas rusas".
En particular, los residentes deberán recibir autorización gubernamental para conceder créditos o realizar transacciones que impliquen cambios en los derechos de propiedad de valores y bienes inmuebles con esa categoría de extranjeros.
Estas restricciones no se extienden a las operaciones del Banco Central de Rusia y de los órganos gubernamentales, subraya el decreto, que encarga al Ejecutivo elaborar en un plazo de cinco días el procedimiento para la concesión de las autorizaciones.
Según el Gobierno de Rusia, el país tiene el suficiente potencial para hacer frente a las severas sanciones occidentales en repuesta al comienzo de la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero.