La justicia peruana puede iniciar cuando lo requiera el proceso de extradición de Luis Fernando Figari, fundador del Sodalicio acusado de abuso sexual contra menores, pues su caso no es competencia de la Santa Sede, aclararon hoy voceros de la Conferencia Episcopal del Perú (CEP).
En un comunicado difundido esta mañana, representantes de la CEP indicaron que en repetidas ocasiones se ha atribuido a la sede apostólica el haber ocultado a Figari para protegerlo e impedirle responder directamente las diversas acusaciones en su contra.
"No se ha reservado ninguna protección o privilegio de ningún tipo a Figari", enfatizó monseñor Miguel Cabrejos, presidente de la CEP y arzobispo de Trujillo, al leer el documento durante una conferencia de prensa.
Dijo que la prohibición para que Figari no regrese al Perú buscó evitar que cause daño a alguien más u obstaculice el curso de la justicia, pero no es absoluta . "Puede regresar al Perú por razones graves y con el permiso por escrito del superior general (del Sodalicio)".
Monseñor Robert Prevost Martínez, segundo vicepresidente de la CEP, explicó que la estadía en Roma de Figari fue a sugerencia de la Congregación para la Vida Consagrada, a la que pertenece el Sodalicio.
“Pueden convocarlo al Perú, depende del Estado peruano hacerlo. Ya el Ministerio Público pidió prisión preventiva en diciembre pasado. Se puede continuar el proceso y realizar el pedido de manera oficial”, subrayó.
Monseñor Prevost aclaró que Figari es laico, no religioso; por lo tanto, las competencias jurídicas de su caso son en el área civil y no con procesos de la iglesia católica.
“La iglesia no interviene cuando los abusos sexuales los comete un laico. Tal como lo señala el Papa Francisco nosotros estamos comprometidos a que nunca más haya una cultura del encubrimiento, ni del abuso”, señaló.
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(FIN) SMS/RRC
Publicado: 1/6/2018