La reforestación es el repoblamiento o establecimiento de especies arbóreas o arbustivas, nativas o exóticas, con fines de producción, protección o provisión de servicios ambientales, sobre suelos que pueden o no haber tenido cobertura forestal. Este mecanismo es fundamental para una buena adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático en el Perú.
Según el
Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), los principales beneficios de la
reforestación son el incremento de la
fertilidad del suelo y la retención de la humedad; así como la estabilización de los suelos, reduciendo la erosión de los campos. De esta manera, se proporciona un
microclima favorable para los microorganismos y la fauna silvestre, entre otros.
Precisó que una plantación de enriquecimiento es la técnica o práctica de regeneración asistida, consistente en plantar especies forestales, en bosques primarios o secundarios, con el fin de mejorar la producción y el valor futuro del bosque.
El establecimiento de plantaciones va acompañado de actividades de preparación de suelos (mejora la captación de nutrientes y humedad), como también avanzadas técnicas de control de malezas y fertilización de los suelos, lo que facilita el crecimiento de los árboles. Las plantaciones forestales se realizan mediante la participación de gran número de trabajadores capacitados y competentes.
Un uso sostenible de los bosques exige un adecuado equilibrio en las técnicas de silvicultura para mantener la adecuada proporción de bosques naturales y explotar las plantaciones de la forma menos dañina posible.
El 5 de febrero último, el presidente Martín Vizcarra y el ministro del sector, Gustavo Mostajo, pusieron en marcha el plan de siembra de los primeros 55,000 plantones forestales con el propósito de tener más áreas reforestadas.
El Minagri, a través del
Programa de Desarrollo Productivo Agrario Rural (Agrorural) asignó recursos para llevar este plan de reforestación, y asimismo se promoverán convenios y alianzas que permitan contar con el apoyo de gobiernos regionales, locales y empresas mineras para alcanzar la meta de un millón de árboles en esa región.
Igualmente, en una primera etapa se beneficiarán en Cajamarca alrededor de 200 familias con la instalación de los primeros plantones de la especie pino radiata.
El jefe de Estado resaltó el potencial de la región Cajamarca para llevar adelante proyectos de reforestación como los impulsados por el sector Agricultura. También exhortó a los gobiernos regionales, locales y comunidades campesinas a sumarse a estas iniciativas.
Por su parte, el gobernador regional de Cajamarca, Mesías Guevara, mostró su apoyo a los planes del Minagri y anunció que su región ha proyectado reforestar 30,000 hectáreas.
Historia
De acuerdo al Minagri, la reforestación en el Perú se inició en 1870 con la introducción de las especies de eucalipto en la Sierra por iniciativa de las empresas mineras.
Posteriormente, en la década de 1960, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se impulsa las plantaciones forestales a través de un programa crediticio forestal, lo que permitió establecer las primeras 56,000 hectáreas hasta el año 1974, luego del cual se continúan las plantaciones bajo diversas modalidades de financiamiento como contratos cooperativos, inversión, trabajo y crédito.
En 1980 se crea el canon de reforestación, constituido con los aportes de los extractores forestales con la finalidad de reponer los árboles que se han aprovechado del bosque, cuya actividad culminó el año 2000, con la oficialización de la Ley N° 27308, Ley Forestal y de Fauna Silvestre.
Esta tarea de reforestación es ejecutada por el Ministerio de Agricultura y Riego, con el apoyo de otros ministerios, instituciones públicas y del sector privado, teniéndose a la fecha una superficie de más de 800,000 hectáreas de bosques plantados a nivel nacional, principalmente con las especies de eucaliptos y pinos.
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