La continuidad de servicio de agua potable por parte de las 50 empresas prestadoras a nivel nacional mejoró en 0.69% en el 2019 con relación al 2018, alcanzando un valor de 18.48 horas/día en promedio, reportó la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass).
De acuerdo con los resultados del Benchmarking Regulatorio de las Empresas de Agua 2020, elaborado por el ente regulador, la densidad de atoros y roturas por kilómetro de red de alcantarillado y agua potable disminuyó en 6% y 27.4%, respectivamente.
Ello debido a la reducción del número de roturas registradas en las empresas prestadoras, mientras que el agua no facturada presentó una ligera mejora en referencia al 2018.
Asimismo, durante la pandemia las principales acciones adoptadas por las empresas prestadoras estuvieron relacionadas con la habilitación de canales de atención para responder con prontitud a más de 18 millones de usuarios a nivel nacional, que representan al 57,27 % de la población.
Para ello, se implementaron oficinas, mesas de parte y chat virtuales, así como aplicativos para la solicitud de fraccionamiento, call center, redes sociales, entre otros canales de atención, con los que se logró atender de manera más eficiente a los usuarios y mejorar la recaudación.
El presidente ejecutivo de la Sunass, Iván Lucich, aseveró que los resultados financieros de las empresas prestadoras a diciembre del 2019 hicieron posible que la mayoría de EPS enfrenten el estado de emergencia sanitaria lo mejor posible, al garantizar la continuidad de los servicios de saneamiento y evitar su deterioro.
Ranking
Los resultados del Benchmarking 2020 revelaron el ranking de desempeño y eficiencia de las empresas prestadoras en el 2019, según el Índice de la Gestión y Prestación de los Servicios de Saneamiento de las EP (Igpss).
Así, los prestadores que lideran el rendimiento, según su clasificación por tamaño (grande, mediana y pequeña) son: Sedapar de Arequipa (81.86%), EP Tacna (74.29%), Emusap Abancay (71.78%) y Emusap Chachapoyas (74.85%).
De acuerdo con el informe, se monitorearon y evaluaron a 669 organizaciones comunales, las cuales operan 732 sistemas de agua. De estos sistemas, 539 (73.6%) cuentan con algún equipo de clorador, de los cuales, 381 equipos (52%) se encuentran operativos.
Sin embargo, solo en 112 (15.3%) de los sistemas de agua consideradas en esta muestra, las organizaciones comunales que los operan realizan verdaderamente la medición de cloro residual y llevan el registro respectivo, de los resultados; lo cual indica que hay mucho trabajo todavía por hacer para generar una cultura de adecuada cloración del agua y asegurar que esté en buenas condiciones para el consumo de la población.
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(FIN) NDP/VLA