La conducción de la Mesa Directiva, ahora solo en manos de Fuerza Popular, representará una mayor exigencia para el fujimorismo, dado que todos los aciertos y los errores que pueda cometer el Congreso recaerán en este grupo parlamentario, indicó hoy Gerardo Távara, secretario general de Transparencia.
“Sin duda, esto puede significar un cambio en el desempeño del Congreso porque lo que habíamos tenido es una alianza de tres partidos en la Mesa Directiva, pero ahora el control está en manos de una sola bancada, que ha dejado de ser mayoría absoluta”, afirmó al comentar la elección de Daniel Salaverry como titular del Congreso, quien estará acompañado por vicepresidentes fujimoristas.
Távara recordó, además, que la sentencia del Tribunal Constitucional, la cual permite conformar nuevas bancadas, podría modificar la composición de los grupos parlamentarios, del cuadro de comisiones ordinarias y de la Junta de Portavoces.
“Habrá una mayor exigencia sobre
Fuerza Popular. Queda claro ahora que
son ellos quienes conducen el Congreso, por tanto, los errores y los aciertos van a recaer con más fuerza sobre ese grupo parlamentario”, apuntó.
Sostuvo también que el acuerdo alcanzado por las bancadas de oposición para enfrentar a Fuerza Popular no es del todo firme, pues algunos de sus votos fueron a la lista fujimorista.
“En todo caso, será importante lo que se defina como agenda legislativa y agenda política. Eso dependerá de la capacidad para establecer puntos de confluencia con la Mesa Directiva”, afirmó.
Agenda parlamentaria
Távara, asimismo, indicó que la agenda legislativa de la Mesa Directiva a cargo de Daniel Salaverry estará marcada por el mensaje del presidente Martín Vizcarra por 28 de julio, pues es él quien en este momento tiene la iniciativa política.
“Eso puede significar mucho para la agenda legislativa.
La reforma judicial será un tema fundamental e ineludible para el Congreso, lo mismo la lucha contra la corrupción, temas más allá de la reforma de justicia, y la reforma política que apenas está en sus pasos iniciales”, apuntó.
En este momento, añadió, el país está en un momento de crispación política en el cual las iniciativas vienen desde afuera del Congreso, como Palacio de Gobierno, los medios de comunicación y la sociedad civil manifestada en las calles.
La agenda a establecerse, sugirió, debe recoger los reclamos de la población, considerando que el Congreso está terminando esta legislatura con una baja aprobación ciudadana.
"Hay una demanda de la población a las instituciones, creo que quienes tienen la conducción de la Mesa Directiva deben interpretar y responder a la demanda de la población que este momento se expresa como rechazo, desconfianza y desaprobación”, afirmó.
(FIN) FHG/CCR
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Publicado: 26/7/2018