Determinar cuál será la
, pronosticar si habrá precipitaciones intensas o si el caudal del río crecerá con el riesgo de desborde es un trabajo que no tiene feriados ni vacaciones y debe mantenerse, así llueva o truene, las 24 horas y los 365 días del año.
“No solo salimos a la ventana a mirar el cielo, hay muchas herramientas, una comprensión del tema físico y matemático, incluso modelos numéricos que alertan de lluvias, pero el pronosticador debe reconocer si funciona para el Perú”, explica a la Agencia Andina Gabriela Rosas, directora de meteorología del Senamhi.
Esta institución tiene 4 direcciones: Meteorología, Hidrología, Agrometeorología y Redes y datos. De todas ellas, la Dirección de Meteorología es la más solicitada. Allí se realiza el monitoreo y el pronóstico del tiempo.
Sus especialistas son quienes generan los avisos y alertas de riesgo para la población. Pero ¿cómo lo hacen? La especialista en meteorología Vania Aliaga nos explica:
Monitoreo
“La primera tarea del día es monitorear cómo está la atmósfera, el panorama de la temperatura y las lluvias. Dos personas nos encargamos de realizarlo. Empezamos analizando la información de las estaciones automáticas y convencionales, que son alrededor de 1,000 en todo el país”, precisa la meteoróloga egresada de la Universidad Nacional Agraria La Molina.
Estas estaciones tienen sensores que miden la temperatura y las lluvias. En las estaciones convencionales trabaja un observador meteorológico que hace dos registros a las 7 de la mañana y a las 7 de la noche en el caso de la precipitación y a la 1:00 pm en el caso de la temperatura. Además ingresa datos a unas planillas para tener la información en físico.
Luego el observador envía esta información mediante el aplicativo “Voz y data” para que llegue al sistema SIEM y obtener así la información en tiempo real.
En el caso de las estaciones automáticas, éstas máquinas tienen sensores y registran la información cada hora durante todo el día y la noche. Sin embargo, pueden malograrse en zonas con lluvias muy intensas. Esto ocurrió en el norte del país durante el
Fenómeno El Niño Costero, allí se malograron muchas y debieron ser reparadas inmediatamente.
Toda esa información luego es analizada por el especialista, que desarrolla los mapas y el resultado final es el aviso meteorológico, un monitoreo que explica lo que pasó, el cual se cuelga en el portal web aproximadamente a las 10:00 a.m.
El pronóstico, lo que pasará
Mientras tanto el otro meteorólogo trabaja en el pronóstico, que tiene validez en un tiempo determinado. Nos indican cómo serán las lluvias: ligera, moderada o fuerte.
“Para pronosticar necesitamos el dato meteorológico, es decir toda esa información que se recoge de las estaciones y que se reúnen en una base de datos".
Otra herramienta es la imagen del satélite meteorológico GOES que cada 15 minutos envía una foto de cómo está el territorio peruano. "Eso es muy útil para saber dónde hay tormentas, cielos despejados, etc.", indica Rosas, meteoróloga que trabaja más de 20 años el en Senamhi.
La tercera herramienta son los modelos numéricos, es decir programas de cómputo que indican cómo se comportará la atmósfera en el futuro. En Senamhi utilizan los modelos americanos, que son gratuitos, y los europeos, explica Vania Aliaga.
“Mientras tengamos más modelos, podemos mirar con varios ojos cómo se está modelando la atmósfera; sin embargo, también es muy importante el conocimiento del pronosticador, ver qué modelo aplica para nuestro país”.
Con la ayuda de estas tres herramientas, el pronosticador decide cuál es la mayor probabilidad de ocurrencia de cierto evento, esa información luego es difundida para conocimiento de la población y de las instituciones correspondientes en la toma de decisiones como el
COEN o Defensa Civil.
Pronosticando desbordes
Por su parte, la dirección de Hidrología de Senamhi se encarga de la predicción hidrológica, que consiste en dar una proyección del estado futuro de nuestros ríos. Para lograrlo, se hace uso de herramientas o modelos matemáticos, hidrológicos e hidráulicos; y de la información que proviene de las estaciones con sensores automáticos que transmiten data en tipo real.
“Con una aplicativo que en forma automática convierte la información que viene de las estaciones, se transforma en caudal a través de algoritmos matemáticos. Este es el punto de partida con el que el pronosticador trabaja para decir cómo será el estado de los ríos en las próximas horas”, explica por su parte Oscar Felipe Obando, director de Hidrología de Senamhi.
De paso, Oscar advierte que sigamos atentos porque marzo sigue siendo uno de los meses con mayor lluvia, por lo tanto, mayor incremento en los caudales.
Más profesionales
“Cuando requerimos más profesionales, lamentablemente no hay disponibles. Es una carrera muy bonita y apasionante, una ciencia que siempre está generando nuevos conocimientos, pero son muy pocos los que se animan a estudiarla”, dice Rosas a modo de queja.
(FIN) MFA/RRC