En el Perú, desde el 1 de enero del 2023 entró en vigencia la Ley 31572, Ley del Teletrabajo, la cual incorpora una serie de normativas e ítems que el trabajo remoto no contemplaba anteriormente, destacó GeoVictoria.
Recordó que el proyecto de reglamento fue publicado por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) y está en proceso de recibir observaciones tanto de empleadores como trabajadores para posteriormente ser anunciado, refirió.
Con lo anterior, el 2023 se dispone como un año en el que la modalidad home office entrará en una etapa de configuración con diversos desafíos a futuro y por ello, comentó cuáles son los cuatro retos del teletrabajo en el país para este año:
• Legislación clara: si bien el trabajo presencial ha vuelto con fuerza, es importante que el home office pueda ser regulado, considerando las variantes que conlleva el conectarse de forma remota para no caer en excesos en las jornadas laborales.
La nueva Ley del Teletrabajo incorpora precisamente una serie de parámetros en materia de compensación de gastos de los trabajadores (luz, internet, etc.) y obligaciones en la atención de salud y seguridad (espacios adecuados para el trabajo en home office, mantenimiento de equipos tecnológicos, entre otros).
Además, establece la necesidad obligatoria de un acuerdo escrito, en el que la empresa estipule con claridad todos los puntos acordados.
• Tecnología para el monitoreo de trabajo: en línea con lo anterior, es relevante que, sin importar el tipo de jornada a la que estén adscritos los colaboradores (mixto o totalmente en home office), esta pueda ser medida de forma objetiva a nivel de ingresos, salidas, permisos, ausencias, horas extras y atrasos.
Pues esto entrega beneficios tanto a empleadores como a trabajadores, ayudándolos a tener claridad respecto a las remuneraciones que reciben, sin importar su jornada laboral, sea esta de medio día, jornada completa o con otro tipo de flexibilidades.
Para ello, uno de los retos principales para las empresas es implementar herramientas tecnológicas innovadoras que permitan precisamente la gestión correcta de tiempos de los colaboradores.
• Impulsar la productividad: es otra de las discusiones que se ha tomado no solo en este tipo de modalidad, sino que en todo lo que engloba la transformación digital de las empresas, con la implementación de nuevas tecnologías dentro de los procesos internos.
En el caso del teletrabajo, es importante junto con respetar las horas a trabajar, también ocuparse por una mejor forma de organización de las tareas a realizar bajo este sistema, tomando en consideración la flexibilidad que se logra gracias al home office.
• Conectividad a internet y compensaciones: la necesidad de impulsar el avance de la conectividad a internet en todo el Perú es clave, ya que es la pieza fundamental para un correcto trabajo de home office.
Al cierre del 2021, según la Encuesta Residencial de Servicios de Telecomunicaciones (Erestel) a cargo del Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), evidenció que el 87.7 % de hogares peruanos ya cuentan con acceso a internet, escenario positivo, pero con un camino aún por recorrer.
Es relevante que las empresas hagan incidencia respecto a la necesidad de llevar la conectividad de internet a todos los departamentos del país, y con ello, impulsar la transformación digital.
Pero a su vez, las empresas, el 2023, tendrán el marco regulatorio establecido respecto a las nuevas normativas de trabajo remoto vinculado a las compensaciones de los gastos de los trabajadores relacionados con los equipos, herramientas y medios vinculados al desarrollo de su actividad laboral, en la que se considera el internet.
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(FIN) NDP/MMG
GRM
Publicado: 17/1/2023