Unas 400 familias del distrito de Caujul, ubicado en la provincia de Oyón, región Lima, han logrado ampliar y potenciar sus emprendimientos rurales, fortaleciendo de esta manera los sistemas de producción familiar gracias al proyecto Haku Wiñay (Vamos a Crecer), que ejecuta el Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes).
El
coordinador técnico de Haku Wiñay en Caujul, Luis Villagómez, explicó que el proyecto además de promover
negocios rurales impulsa el fortalecimiento de los sistemas de producción familiar, capacidades financieras y la mejora de las viviendas rurales para hacerlas más saludables.
Por su parte, el
alcalde distrital de Caujul, Abel Salazar Ríos, dijo que la municipalidad trabaja articuladamente con el Foncodes, brindando apoyo logístico a
Haku Wiñay para el cumplimiento de sus actividades y metas.
El jefe de la Unidad Territorial Lima del Foncodes, Teófilo Alata San Miguel, sostuvo que el proyecto Haku Wiñay, en el distrito de Caujul, trabaja con 400 hogares y una inversión de dos millones de soles.
En el ámbito rural de la región Lima Provincias, Haku Wiñay tiene 6,548 familias usuarias en 39 proyectos productivos con una inversión que asciende a 31.08 millones de soles, precisó el funcionario.
Testimonios de productores
Clelio Julca Girón y su esposa, Flavia Rosales Huaranga, tienen cinco hijos, la mayor de 17 y el menor de 3 años. Viven en Caujul, uno de los seis distritos de la provincia de Oyón, en la sierra norte de la región Lima.
La familia es usuaria del proyecto Haku Wiñay del Foncodes y ha desarrollado capacidades y habilidades para ampliar su negocio Textilería Los Pumas, que confecciona mantas, pullos, gorros y boinas, frazadas, bolsos bordados y otras prendas.
Es uno de los veinte emprendimientos rurales cofinanciados por Haku Wiñay en la zona, proyecto productivo del Foncodes, para diversificar los ingresos familiares en el marco de la estrategia de inclusión económica que encarna esta intervención.
Don Clelio Julca trabaja con dos de sus hermanos, Edwin y Jesús. “Me dedico, además de la chacra, a tejer y hacer prendas como mantas, bolsos, frazadas, con la lana que saco de mis ovejas y también con lana sintética que compro a los productores de la zona".
"Hemos sido uno de los ganadores del primer concurso de Haku Wiñay y compramos dos telares, uno grande y otro chico, una máquina de coser y otros implementos. Y también contratamos a un asistente comercial para vender mejor nuestros productos”, afirmó.
El negocio de Clelio Julca fue uno de los participantes en la Tercera Feria Distrital de Emprendimientos Rurales Inclusivos, en la plaza de Caujul.
Jessica Salazar Roque, Jovita Durán Plácido y Ruth Mattos son socias del emprendimiento Creaciones Punto Cruz Dumaza, otro de los proyectos que apoya Haku Wiñay.
Ellas confeccionan manteles y servilletas, cojines, mandiles y prendas similares con tela cañamazo. También se dedican a producir mascarillas de tela, cumpliendo las normas técnicas del Ministerio de Salud. Usan la microfibra Notex, que filtra el aire, reduciendo la propagación del virus del covid-19.
“Hacemos mascarillas y hemos vendido a los municipios de Caujul y Naván, y en otras comunidades cercanas”, relató doña Jessica. “Por la pandemia las ventas han caído, pero seguimos produciendo; ahora también hacemos polos como éste”, indicó orgullosa, mostrando lo que llevaba puesto.
“Mejoramiento de la calidad del melocotón” es otro negocio presente en la feria. Es dirigido por Juvenal Toribio Cauchi. Lo vende como fruta, pero le da valor agregado al transformarla en melocotones en almíbar y néctar de melocotón, que vende envasados en frascos de vidrio.
Los visitantes de la feria Haku Wiñay también pudieron adquirir diversos productos como paltas, ciruelas, quesos, yogures, manjar blanco, miel de abeja, carnes de ovino y de cerdo, trucha y platos de la gastronomía local y regional.
(FIN) NDP/JCB/MAO
GRM
Publicado: 15/6/2021