El fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, ratificó hoy que no renunciará a su cargo, a pesar de haber admitido que faltó a la verdad al negar una reunión con periodistas en casa del empresario Antonio Camayo, por iniciativa del juez César Hinostroza.
“No tengo por qué. No he cometido ningún delito”, manifestó en declaraciones a radio Exitosa.
La autoridad del Ministerio Público dijo que aceptó reunirse con medios de comunicación porque había una campaña mediática en su contra suyo objetivo era “enlodar su nombre y trayectoria”.
Precisó que la reunión se llevó a cabo en el domicilio de Antonio Camayo, aunque indicó que en ese momento no sabía quién era él ni tenía conocimiento de que era el propietario de la casa.
"A mi no me van a encontrar nada delicado, nada grave porque siempre me he conducido dentro de la rectitud y, como no hay otra situación, están creando toda una atmósfera negativa por la famosa reunión como si fuera un delito reunirse con los medios ¿cuántas veces los funcionarios nos reunimos con los medios para llevar información dentro del marco legal (...) quien me puede decir que la reunión con un grupo de periodistas es delictiva?", manifestó.
Asimismo, mencionó que la reunión contó con la participación de al menos 20 periodistas de Lima, aunque evitó revelar los nombres.
“¿Para qué mencionarlos? Pero eran medios de Lima, ellos me preguntaron sobre mi plan de trabajo y sobre la actuación que habría tenido dentro de mi vida profesional”, sostuvo.
Añadió, asimismo, que los cuestionamientos por este tema son impulsados por sectores interesados en evitar la continuación de las investigaciones al caso Lava Jato.
(FIN) CCR
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Publicado: 1/8/2018