Andina

Programa Juntos redujo en 10% riesgo de anemia en madres beneficiarias

Según estudio de Universidad Peruana Cayetano Heredia

ANDINA/Melina Mejía

09:45 | Lima, ago. 30.

Desde su creación en el 2005, el programa Juntos redujo en 10% el riesgo de contraer anemia entre las mujeres beneficiarias y aumentó en 27% los controles de talla y peso de sus hijos, revelaron hoy expertos en salud pública de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH).

Estos resultados forman parte de un estudio sobre los efectos de las políticas sociales en la salud, que presentó José Pérez Lu, investigador de la UPCH, al programa internacional “Equidad de la Salud Materna e Infantil” (Machequity), que trabaja con la universidad canadiense McGill.

Dicho programa analiza los efectos que tienen las políticas sociales diseñadas para reducir desigualdades económicas y de género en la salud de niños, niñas y mujeres menores de 50 años.

Pérez Lu indicó a la agencia Andina que su investigación demuestra además que el programa Juntos logró que el 21% de mujeres cumpliera con el calendario de vacunas de sus hijos y que 61% tenga el peso que corresponde a su talla. 

"La investigación se realizó en base al análisis de datos de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes) que el Instituto Nacional de Estadística e Informática desarrolla anualmente. Se estudiaron las Endes en el período 2000-2014, precisó. 

Lu señaló que la investigación dio cuenta también que Juntos redujo en un 14% la prevalencia de anemia en los niños, aumentó en 23% los partos institucionales o realizados en centros de salud, pero también incrementó en 10% el riesgo de prevalencia de sobrepeso en las mujeres. 

"A pesar de ser accesibles, los datos de las Endes no se exploran lo suficiente como para saber cómo van las políticas sociales. Considero que Juntos necesita algunos ajustes como implementar un componente educativo para que las mujeres beneficiarias se alimenten adecuadamente y desarrollen prácticas saludables para no tener sobrepeso", dijo el experto. 

Experiencias internacionales e implicancias nacionales

Arijit Nandi, de visita en el Perú para analizar, junto con otros integrantes de Machequity, experiencias internacionales sobre el tema, manifestó que la salud es un componente de desarrollo del individuo y su país, y que es un factor importante que influye en la economía de las naciones. 

"Por más simple que sea una enfermedad, esta afecta la vida de una persona, incluidos su economía y trabajo. Un niño con mala salud tiene menos probabilidades de que le vaya bien en la escuela y en el trabajo cuando sea adulto. Las familias pobres son las que tienen los peores resultados", comentó. 

Para el investigador principal de Machequity, las desigualdades en salud son un problema global en todos los países del mundo, y desgraciadamente se desconoce qué intervenciones (políticas) acaban con esa desigualdad y mejoran la salud de las personas, precisó.

Calidad de vida, calidad de salud

Jody Heymann decana de Salud Pública de la Universidad de California de Los Ángeles (UCLA), sostuvo que mientras le gente reconozca que la calidad de vida se asocia con la calidad de salud, es necesario que los gobiernos midan el impacto que tienen sus políticas sociales en la salud de su gente. 

Mencionó que gracias a un estudio realizado sobre licencia por maternidad, se conoció que en los países donde las mujeres tienen por lo menos 14 semanas de licencia, hubo menos mortalidad infantil, mientras que los que tienen menos de ese plazo, presentan mayor número de casos. "Si las madres están menos tiempo con su bebé, existe más riesgo de que este se enferme", indicó. 

De la misma manera, afirmó que la educación gratuita impacta en la salud de las personas, sobre todo de las mujeres, porque atrasa el inicio de su primer parto y con ello se reduce la mortalidad infantil. 

"La visión de salud debe incorporarse en todas las políticas públicas y en las políticas sociales debe medirse su impacto en la salud", precisó. 

El programa Juntos realiza una transferencia económica de S/. 200 cada dos meses a madres de niños, niñas y adolescentes más pobres del país entre 0 y 19 años. Este dinero se entrega a cambio de que cumplan con llevar a sus hijos a sus controles de salud y tengan formación escolar. Actualmente beneficia a unas 700 mil familias de las zonas rurales más pobres del país. 

(FIN) SMS/LZD


Publicado: 30/8/2015