El Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal) aseguró que el agua que distribuye a los distritos de Lima Metropolitana y el Callao cumple con los estándares de calidad establecidos por la normativa nacional vigente, y que se mantiene dentro de los parámetros técnicos que garantizan su potabilidad y seguridad para el consumo humano.
En un comunicado oficial, la empresa estatal señaló que los valores de cloro residual libre en la red de distribución están por encima del mínimo requerido (0.5 mg/L), según los resultados obtenidos mediante su monitoreo permanente, que abarca desde las plantas de tratamiento hasta las conexiones domiciliarias.
Sedapal remarcó que el recurso hídrico pasa por rigurosos procesos de tratamiento, desinfección y control de calidad, y que a la fecha no se ha detectado ninguna anomalía que comprometa la calidad del agua distribuida en Lima y Callao.
La entidad también se pronunció sobre un informe difundido recientemente por un medio local, basado en datos de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) del año 2022. Al respecto, precisó que no fue informada ni participó en el proceso de muestreo y que dicho documento fue remitido únicamente a gobiernos regionales y locales.
Sedapal observó además que el informe en mención carece de data técnica fundamental, como las fechas, horarios, ubicaciones exactas y puntos de muestreo, y advirtió que varias de las muestras habrían sido tomadas al interior de predios, áreas que no están bajo su responsabilidad. Recordó que el mantenimiento de instalaciones internas como cisternas, tanques elevados y griferías corresponde exclusivamente a los usuarios.
Finalmente, Sedapal informó que mantiene protocolos de vigilancia y control que incluyen muestreos de campo, análisis fisicoquímicos y microbiológicos, y verificaciones constantes en laboratorios certificados. Además, cuenta con un sistema de monitoreo en línea para supervisar en tiempo real la calidad del agua en puntos estratégicos de la red de distribución.
La institución reiteró su compromiso con la salud de la población y el suministro de un servicio de agua potable seguro, confiable y de acuerdo con los estándares exigidos por ley.