Andina

Plantean que Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo incluya al trabajo doméstico infantil

Representante de Organización Internacional del Trabajo

OIT plantea que Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo considere al trabajo doméstico infantil para brindar una adecuada atención a los menores que desempeñan esta labor. ANDINA/Oscar Farje

OIT plantea que Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo considere al trabajo doméstico infantil para brindar una adecuada atención a los menores que desempeñan esta labor. ANDINA/Oscar Farje

10:40 | Lima, dic. 15.

La inclusión del trabajo doméstico infantil en los alcances de la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo, a fin de que se brinden mejores servicios de protección social a los 100 mil menores que desempeñan esa labor en Perú, propuso la Organización Internacional del Trabajo (OIT).


María Olave, oficial de del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) de la OIT consideró que la citada norma comprende el ámbito de las empresas, pero no toma en cuenta al trabajo doméstico adulto ni al infantil.

En diálogo con la agencia Andina, refirió que los menores que cumplen labores domésticas están expuestos a riesgos de diversa índole como accidentes mientras realizan la limpieza de la vivienda, cocinan, lavan, planchan o cuando tienen bajo su cuidado -sin estar preparados para ello- a niños menores que ellos, adultos mayores o personas con alguna enfermedad. 

El nivel de vulnerabilidad infantil aumenta si el menor trabajador tiene menos de 14 años, edad mínima para trabajar según la ley vigente, o si la jornada de trabajo se extiende más allá de las horas legalmente permitidas, lo que termina afectando su salud física, emocional y mental. A ello se suma la exposición a posibles maltratos y abusos por parte de sus empleadores y familiares. 

Corresponde a los poderes Ejecutivo y Legislativo considerar una revisión de la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo para incluir al trabajo doméstico infantil y garantizar la protección de los menores que lo desempeñan, indicó.

La especialista consideró también que junto con una adecuación de la norma se debe mejorar el servicio de salud -presente en todo el territorio nacional- dirigido a la atención de menores que trabajan, en especial a los que desempeñan labores domésticas.

"Cuando sufren algún daño durante su jornada laboral y acuden a un centro de salud pública, se registra que las causas del daño fueron accidentes como una caída, y no se atribuye el hecho a una vulnerabilidad propia de su centro de trabajo. Esto no está contemplado en la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo ni en ninguna otra norma laboral", manifestó. 

En tal sentido, Olave recomendó al sector Salud que tenga un rol más activo en la identificación del trabajo infantil y adolescente, a fin de contar con información más precisa y real para diseñar políticas de atención a este segmento poblacional vulnerable, así como mejorar la atención especializada para menores. 

Olave adelantó que en la próxima encuesta especializada en trabajo infantil que realizarán el 2015, a nivel nacional, el Ministerio de Trabajo y el Instituto Nacional de Estadística e Informática, con apoyo técnico de la OIT, se analizará el grado de vulnerabilidad en el trabajo doméstico infantil.

Señalo que para ello se incluirá en la ficha de preguntas -no contempladas en la anterior encuesta especializada del 2007-  indicadores objetivos como la exposición al peligro (condiciones en las que se realizan las labores dentro y fuera del hogar), la jornada (diurna, vespertina o nocturna), las horas de trabajo. A ellos podría sumarse la manipulación de herramientas calificadas como riesgosas, lo cual constituye información complementaria.

Ratificación del Convenio 189

Olave también consideró importante que el Perú ratifique el Convenio 189 de la OIT que reconoce los derechos laborales de las trabajadoras y trabajadores del hogar. "Si logramos que las empleadas del hogar tengan un trabajo adecuado, aquellas que son jefas de hogar y madres de niñas, niños y adolescentes, no se verán en la necesidad de llevarlos consigo al lugar donde laboran porque no tienen donde dejarlos", dijo.

Al llevar a sus hijos consigo, las trabajadoras del hogar los introducen sin quererlo en ese ámbito laboral y, de alguna forma, pueden llegar a asumir que ese tipo de trabajo es el único al que pueden aspirar y acceder sus hijos. "Esta es una entrada directa a este tipo de labor. Para evitar que ello ocurra, la calidad del trabajo doméstico adulto también tiene que ser mejorada", anotó.

(FIN) LZD/LZD


  


Publicado: 15/12/2014