El Ministerio de Relaciones Exteriores rindió hoy homenaje al diplomático peruano José María Barreto Bustíos por haber contribuido a salvar la vida de numerosas personas de origen judío que huyeron de la persecución nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
El evento, llevado a cabo en el Centro Cultural Inca Garcilaso de la Cancillería, fue presidido por el ministro de Relaciones Exteriores, Gonzalo Gutiérrez; y contó con la presencia del embajador de Israel, Ehud Moshe Eitam; así como familiares del señor Barreto, entre ellos su nieto, el embajador Oswaldo de Rivero Barreto, quien recibió la distinción a nombre de la familia.
La ceremonia contó, además, con la asistencia de congresistas integrantes de la Liga Parlamentaria Perú-Israel, sobrevivientes del Holocausto residentes en el Perú, y representantes de organizaciones de derechos humanos.
El canciller Gutiérrez destacó las cualidades profesionales del embajador Barreto Bustíos en el ejercicio de sus funciones como diplomático, en defensa de los intereses del Perú y de nuestros compatriotas en el exterior.
Asimismo, destacó su elevado espíritu humanitario y de sólidos principios morales, que lo inspiró a ir más allá de lo que el deber le exigía, en un entorno político extremadamente delicado, logrando con su esfuerzo salvar la vida de 58 personas, incluyendo a 14 niños.
Como embajador peruano en Suiza, Barreto Bustíos expendió pasaportes peruanos a muchos ciudadanos judíos para que pudieran escapar de la persecución nazi, a pesar de no tener ninguna obligación y desoyendo una orden de la Cancillería de la época que prohibió entregar ese documento a ciudadanos extranjeros.
Por esta acción, el embajador Barreto fue sancionado y expulsado por las autoridades de la Cancillería peruana de la época.
Barreto Bustíos recibió de manera póstuma la distinción “justo entre las naciones” de parte de la Autoridad Israelí para el Recuerdo de los Héroes y Mártires del Holocausto.
(FIN) NDP/CCR
Publicado: 11/9/2014