Andina

Latidos del bosque: identificar “focos de calor” es clave para evitar incendios forestales

Problemática que ocasiona pérdida de bosques, flora y fauna silvestre es abordada en podcast del Serfor

Los incendios forestales provocan la pérdida de nuestros bosques y de diferentes tipos de vegetación, así como la muerte de animales domésticos y silvestres. En el 98 % de los casos son ocasionados por el ser humano, luego de quemar los rastrojos o restos de sus cosechas y perder el control del fuego.

Los incendios forestales provocan la pérdida de nuestros bosques y de diferentes tipos de vegetación, así como la muerte de animales domésticos y silvestres. En el 98 % de los casos son ocasionados por el ser humano, luego de quemar los rastrojos o restos de sus cosechas y perder el control del fuego.

12:28 | Lima, may. 14.

Los incendios forestales provocan la pérdida de nuestros bosques y de diferentes tipos de vegetación, así como la muerte de animales domésticos y silvestres. En el 98 % de los casos son ocasionados por el ser humano, luego de quemar los rastrojos o restos de sus cosechas y perder el control del fuego.

“Una flama puede ocasionar un gran incendio y el fuego no perdona”, es una de las primeras frases del episodio 6 del podcast Latidos del Bosque del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), dedicado a conocer la problemática de los incendios forestales en el Perú y las acciones que se ejecutan para prevenirlos.

En este sexto episodio se aborda una grave problemática cuya solución requiere la participación de todos. El número y magnitud de los incendios forestales aumenta cada año, lo cual pone en jaque muchos espacios naturales y ocasiona múltiples pérdidas económicas, como la pérdida de grandes extensiones de bosques. Y lo más lamentable es que también pueden perderse vidas humanas, lo que es invalorable e irremediable.


En su mayoría, los incendios forestales provocados por la actividad humana debido principalmente a la quema de rastrojos con el propósito de iniciar una nueva siembra, se registran en la sierra. Existe la falsa creencia de que el humo generado por la quema de los desechos agrícolas se atraen las lluvias y la ceniza fertiliza el terreno. En muchos casos, el fuego se escapa de control y se genera un devastador incendio.

Uno de ellos fue el acontecido en zonas de cultivo del distrito cusqueño de Ocongate, donde el fuego provocó la pérdida de grandes extensiones de pajonales, queñuales y eucaliptos, así como el deceso de un menor de edad que no pudo escapar del siniestro.

Identificar los “focos de calor”

En el marco de sus funciones, el Serfor gestiona y promueve el uso sostenible, la conservación y la protección de los recursos forestales y de fauna silvestre. Para ello, busca reducir progresivamente el número de incendios forestales en el territorio nacional. Advierte también que originarlos es un hecho que infringe la Ley N° 29763, Ley Forestal y de Fauna Silvestre.


Una de las estrategias que usa el Serfor es tener un registro diario de los “focos de calor”; es decir, identificar mediante datos remitidos por satélites los lugares donde habría un aumento de temperatura y en donde se podría originar un incendio forestal.


“Se analiza qué focos de calor tienen las características para poder convertirse en incendio, con el fin de alertar a las autoridades y monitorear qué tipo de ecosistemas se podrían ver afectados y si hay poblaciones humanas cerca; y con una alerta oportuna, se puede evitar que estos se propaguen”, sostiene Romina Liza, analista de monitoreo de recursos forestales del Serfor, quien refirió que en el 2020 se registraron alrededor de 1,500 alertas de incendios forestales.

Incrementa el efecto invernadero

Los incendios forestales generan cambios locales en el clima, debido a que se pierde la cobertura vegetal y también se emite una gran cantidad de dióxido de carbono, con lo cual se incrementa el efecto invernadero y se reduce la presencia de lluvias. 


Todo ello ocasionaría, a lo largo del tiempo, periodos más extensos con ausencias de lluvias, un alza de la temperatura promedio y la presencia de sequias severas con la consecuente disminución de los caudales de los ríos, el avance de la desertificación, salinización del suelo, entre otros factores negativos.

Prevenir cuesta menos que combatir un incendio forestal

Para Elvira Gómez, directora general de la Dirección General de Información y Ordenamiento Forestal y de Fauna Silvestre del Serfor, las causas más frecuentes de los incendios forestales, tanto en costa, sierra y selva, generalmente son las quemas agrícolas del ámbito rural, por lo que se trabaja con diversas instituciones para brindar charlas de capacitación y prevención.

Agregó que no solo se ve afectado el patrimonio natural y las obras de construcción. La salud humana también es amenazada, debido a la emisión de gases tóxicos y la posible aparición de enfermedades broncopulmonares que deben ser atendidas. Y teniendo en cuenta el presente escenario de pandemia debido al covid-19, la situación es doblemente preocupante.


El cambio climático incidirá en la ocurrencia de más periodos secos y que en algunos lugares disminuyan las fuentes de agua, por lo que la quema de tierras que desencadena los incendios forestales agudizarán esta lamentable situación.

Dañados los bosques, el clima empeorará y con menor humedad serán menos frecuentes las lluvias y disminuirán las fuentes de agua, todo lo cual afectará la productividad agrícola.

Trabajo articulado

Frente a este panorama, es fundamental la articulación en todos los niveles de gobierno para prevenir este tipo de incidentes y evitar sus consecuencias. “Serfor trabaja de manera articulada con varias entidades como el Sernanp, el Senamhi y el Indeci para monitorear primero dónde se producen los siniestros, a fin de informar a las autoridades regionales y locales para que adopten las medidas de atención de la emergencia”, expresó.


También se brinda talleres de capacitación a los agricultores para que, en vez de hacer quemas de los campos de cultivo, apuesten por otros métodos de abonamiento del terreno como el compostaje basado en los residuos orgánicos que contribuye a fertilizar y mejorar la calidad de los cultivos.   

Del mismo modo, se capacita a los gobiernos regionales en el manejo de la plataforma de monitoreo y sensibiliza a la población, explicando los daños causados por los incendios forestales, así como la forma de erradicar las malas prácticas que los originan. 

Todos estamos llamados a actuar

El Serfor sostiene que los gobiernos regionales deben contar con un plan de prevención y manejo de riesgos de desastres que contemple un protocolo de actuación frente a los incendios forestales. 


Cuando se afecta el patrimonio, la Fiscalía y la Policía especializadas en materia ambiental inician un proceso sancionador. Sin embargo, los daños al entorno natural son algunas veces muy difíciles de reparar porque se requieren muchos años para recuperar las condiciones anteriores al incendio forestal.

Finalmente, el Serfor recuerda que, ante la presencia de un posible incendio forestal, se debe avisar de inmediato a las autoridades para que adopten las acciones correspondientes, y hay que dirigirse a un lugar seguro para no poner en peligro la vida.

(FIN) LZD/MAO

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Publicado: 14/5/2021