El congresista Miguel Castro (FP) reveló anoche ser el testigo protegido mencionado por el fiscal José Domingo Pérez y que declaró sobre los aportes a la campaña de Fuerza 2011 porque la situación jurídica de su familia estaba en riesgo.
"El testigo protegido del que habla el fiscal soy yo", declaró en el programa Beto a Saber.
Esta mañana, el fiscal José Domingo Pérez, quien investiga los aportes a la campaña de Keiko Fujimori el 2011, indicó que el testigo protegido con el código 2017-55-8 responsabilizó directamente al parlamentario Miguel Castro en el ocultamiento de dinero presuntamente ilícito que ingresó a Fuerza 2011, hoy Fuerza Popular.
El legislador sostuvo que decidió brindar una entrevista periodística porque se le implicó en una investigación que, a su juicio, no ofrece garantías de un debido proceso y porque al haberse señalado hoy su testimonio se levantó la reserva que debe tener un testigo protegido.
Contó que se presentó a la Fiscalía de Lavado de Activos en forma voluntaria, dado que había otro testigo protegido que le atribuyó haber firmado recibos para encubrir supuestos aportes a la campaña fujimorista el 2011 y que además señaló a su familia.
“Cuando acudí a la Fiscalía tenían evidencias de que mis cuñados, trabajadores, mi madre enfrentaban la posibilidad de un allanamiento y detención preliminar; ante eso, lógicamente, vas a anteponer a tu familia”, afirmó.
Evitó abundar en detalles sobre su participación en las acciones que habrían desplegado en Fuerza 2011 para ocultar el origen de los fondos de la campaña presidencial de
Keiko Fujimori, a quien se acusa de liderar una organización criminal dentro de su partido para lavar dinero que habría sido donado por empresarios que no querían ser identificados.
Miguel Castro dijo no ser parte de la cúpula del partido fujimorista y tampoco tener relación con las personas que manejaron el dinero para la campaña o que hicieron las presuntas donaciones.
Sostuvo que ingresó a la política para hacer cosas positivas y que es de los parlamentarios que en las últimas semanas
intentó tender puentes con el Ejecutivo, porque considera que la “confrontación no conduce a nada” en el país.
“No quiero ver a mi esposa ni a mi madre detenidas”, refirió para luego agregar que no se considera un traidor a Fuerza Popular y que no renunciará al partido.
“Antepuse la integridad de mi familia ante esta situación y mi propia carrera política. He sido destruido en los medios acusado de ser lavador de dinero, cosa que no soy”, afirmó.
El congresista Castro se presentó en el programa de televisión acompañado por su abogado, Jorge Castro, quien expresó su desacuerdo con el fiscal por exponer el testimonio de un testigo protegido.
Debido a ello dijo que pedirá al juez Richard Concepción Carhuancho invalidar este testimonio, para evitar que sea usado en la investigación.
Con Miguel Castro son dos los parlamentarios que se presentaron como testigos protegidos en la pesquisa por la cual se ordenó la prisión preventiva por 36 meses para Keiko Fujimori y que comprende también a sus asesores Pier Figari, Ana Herz y Vicente Silva Checa.
Rolando Reátegui es el otro legislador que declaró como testigo protegido en este caso. Dijo que
se vio obligado a decir su verdad porque su familia y los dirigentes del partido en la región San Martín que simularon falsos aportes a Fuerza 2011 no recibieron apoyo del partido.
(FIN) FHG
GRM
Publicado: 5/11/2018