Andina

Objetivo del autogolpe fue mantener poder para el enriquecimiento ilícito

Extitular del Tribunal Cosntitucional Javier Alva Orlandini. Foto: ANDINA/Archivo.

Extitular del Tribunal Cosntitucional Javier Alva Orlandini. Foto: ANDINA/Archivo.

15:31 | Lima, abr. 04 (ANDINA).

El autogolpe del 5 de abril de 1992 nunca tuvo una justificación y su objetivo real siempre fue el enriquecimiento ilícito de algunos vinculados al poder en el régimen de Alberto Fujimori, señaló hoy el expresidente del Tribunal Constitucional Javier Alva Orlandini.

Consideró “nefasta” esa fecha para la historia del país y pidió a los peruanos no olvidar el daño ocasionado a la democracia, para evitar que en un futuro alguien pueda pretender vulnerarla.

Condenado a 25 años de cárcel por violaciones de los derechos humanos y corrupción, Alberto Fujimori encabezó un autogolpe, el 5 de abril de 1992, con el cierre del Congreso, e intervención del Poder Judicial y organismos autónomos, lo que le permitió cambiar la Constitución peruana y postular a la reelección en 1995.

“Fujimori fue elegido democráticamente (en 1990) y se convirtió en un dictador, disolvió el Congreso, el Tribunal de Garantías Constitucionales y destituyó a la mayor parte de los vocales de la Corte Suprema. El golpe no tuvo ninguna justificación sino el anhelo de controlar el poder para el enriquecimiento de quienes, abierta o encubiertamente, ejercían funciones públicas importantes”, dijo.

Sostuvo que si el entonces gobierno de Fujimori necesitó realizar cambios en el país pudo realizarlos a través de reformas en el Parlamento; sin embargo sólo cometió “actos arbitrarios y abusivos” que quedarán en la historia como una dictadura.

Fujimori Fujimori, quien gobernó de 1990 a 2000, encabezó un golpe institucional en 1992, que le permitió disolver el Congreso de la República, cambiar la Constitución Política del Perú y postular a la reelección.

Alva Orlandini consideró que los actuales partidos políticos y los medios de comunicación tienen una gran responsabilidad, ya que deben difundir estos hechos a las futuras generaciones, a fin de que la democracia no vuelva a ser vulnerada.

Recalcó que la juventud no debe ignorar estos hechos, pues las dictaduras y los movimientos que enarbolan ideología de violencia muchas veces pretenden retornar tras el olvido de la población.

“Todos los dirigentes políticos deben dar más tiempo a la tarea de fortalecer la actividad partidaria, los partidos son indispensables para preservar la democracia y hacer educación, la juventud también debe investigar e involucrarse más en la vida política nacional”, apuntó.


(FIN) JCR/FPQ

GRM

Publicado: 4/4/2012