"Estos manuscritos, fechados entre 1587 y 1613 son escrituras públicas que cuentan de los inicios, crecimiento y desarrollo del cultivo de la vid en las viñas; la producción y comercio del vino y aguardiente a través de compañías y pulperías y tiendas", refiere el comité de la Unesco.
En total, el Comité Regional para América Latina y el Caribe del Programa Memoria del Mundo de Unesco realizó 27 nuevas inscripciones en el Registro Regional Memoria del Mundo de América Latina y el Caribe de la Unesco. Además de los documentos sobre el origen peruano del pisco fue inscrito también la colección de ediciones del Diario Oficial El Peruano, del siglo XIX (1868 II semestre-1900) con sus 54 volúmenes facticos, destaca por ser la más completa que se resguarda en territorio peruano.
Los documentos presentados fueron:
1. Escritura pública de carta de pago y finiquito entre Manuel de Azante y Jorge Capelo (1587). Esta joya documental datada el 8 de noviembre de 1587 (acaba de cumplir 437 años desde que se emitió), conocida hoy como el documento más antiguo que habla sobre la producción del aguardiente de uva (destilado que hoy se conoce como pisco, nuestra bebida de bandera); contiene el pleito mediante el cual Jorge Capelo solicita a Manuel de Azante el pago de la mitad de sus bienes y hacienda, lo motivó a pedir que le devuelvan una caldera y otras cosas que le había entregado. Por su lado, Manuel de Azante pedía a Jorge Capelo el pago y cuenta de mucha cantidad de aguardiente y vino, entre otras cosas que le había entregado. Se muestran los registros más antiguos relacionado a la producción y comercio del aguardiente de uva, mencionando materiales necesarios para su destilado, y también mencionando cantidad de aguardiente en los almacenes.
2. Escritura de Compañía entre Juan Corzo y Andrea Candia (1589). Este segundo documento, datado el 02 de noviembre de 1589, es un testimonio en el cual se evidencia la constitución de una compañía con fines de pulpería en la Villa de Valverde, esta funcionaba desde 3 años antes de la fecha de la escritura (es decir en 1586), y en el documento se aprecia otros aprovechamientos y buenas diligencias en que adquirieron los bienes siguientes: 400 botijas de vino que estaban embarcadas en el barco de Felipe Corzo y 100 botijuelas de aguardiente que iban en el mismo navío y barco, licores que eran llevados para ser vendidos por Juan Corzo en el puerto de Arica o en donde a él le pareciera, siendo las ganancias repartidas por igual entre ambos personajes. Es decir, en el mismo documento podemos apreciar certezas de producción y comercialización marítima del aguardiente de uva, que habría salido del puerto de Magdalena de Pisco.
3. Escritura pública de testamento de Manuel de Azante (1605). El tercer documento, datado el 30 de octubre de 1605, mediante el cual Manuel de Azante, natural de la isla de Zante en el reino de Venecia, nombra como albaceas a Pedro Manuel, Jorge de Candia y Nicolás de Candia; y como herederos a sus hijos Gabriel de Sante, mestizo, residente en el Colegio de los Teatinos, y María Manuela, mestiza, esposa de Mateo Gregorio, residente en Manila. Por otro lado, esta escritura permite conocer materiales necesarios para el destilado del aguardiente de uva, mencionando además cierta cantidad de aguardiente en los almacenes. Algo muy importante es que por primera vez queda registrada en un documento de esta naturaleza y como parte del inventario testamentario, una caldera para hacer aguardiente, es decir queda claro el uso de este importante elemento para el proceso de elaboración del aguardiente de uva que producía y comercializaba Manuel de Azante.
4. Escritura pública del testamento de Pedro Manuel el Griego (1613). Este cuarto documento, datado el 30 de abril de 1613, valioso documento descubierto en 1986, fue hasta el 2024, el documento más antiguo que atestiguaba, ya en el año 1613, elementos para la producción del aguardiente de uva, los cuales se listan en el inventario testamentario. Esta escritura permite dar a conocer diversos aspectos del período del Virreinato del Perú, que se dio en la Villa de Valverde de Ica donde se registran elementos relacionados a la producción, comercio y almacenamiento del aguardiente de uva. Asimismo, por la antigüedad de sus registros nos describen las relaciones de parentesco, los roles de actores de la época que debieron ser regidos por el antiguo formulismo de los testamentos que ocultan prácticas y estructuras mentales relacionadas con la creencia en la paz para una vida futura y la salvación del alma dejando en orden los asuntos terrenales.