Es director técnico de Desarrollo y Tecnología Espacial del Conida, desde donde impulsa la creación de cohetes Sonda para investigar la atmósfera y la ionosfera peruanas. Antes, dirigió el área de Investigación y Operaciones y con un equipo gestó el Centro Nacional de Operaciones de Imágenes Satelitales (CNOIS), que dio lugar al primer satélite PerúSAT.
Miguel Ángel Vidal Valdivieso estudió tecnología satelital en Francia durante los años 90, cuando en el país era impensable crear cohetes o satélites que se lanzaran al espacio. Las urgencias sociales y políticas no permitían imaginar que la ciencia espacial sería necesaria. Antes, de niño, se interesó por la robótica, sin sospechar que de adulto llevaría al Perú más allá del cielo.
Desde el 2010 dirige el área de Desarrollo y Tecnología Espacial de la Agencia Espacial del Perú – Conida, en donde al lado de un experimentado equipo diseñan y arman cohetes tipo Sonda, naves que se utilizarán para estudiar la atmósfera y la ionosfera peruanas.
“Me propuse llevar el Perú al espacio, y estamos fabricando este tipo de
nave espacial, totalmente de manufactura peruana, sin ningún tipo de transferencia tecnológica. Es mi sueño”, dice.
El cohete Sonda alcanza los 100 kilómetros de altura y llega al espacio exterior, explica. En estos momentos desarrollan pruebas con combustible peruano, gracias al cual han llegado a los 40 kilómetros de altura por el momento.
“Estamos en el camino. Nuestra ilusión es promover la investigación espacial con fines pacíficos y científicos en universidades y los centros de investigación de entidades públicas. Se necesitan, por ejemplo, realizar estudios sobre la capa de ozono”.
Amor por el espacio
Miguel Ángel se preparó en tecnología espacial en 1990, en Francia, cuando no era común estudiar esa especialidad y menos sobre lanzadores de satélites. Una experiencia que vivió en sus primeros años en el Conida lo animó a tomar esa decisión.
Ocurrió en 1983, durante la campaña del Proyecto Cóndor, que convocó la
NASA. Fue indescriptible, recuerda. Desde la base científica de lanzamiento de cohetes, en Punta Lobos, cerca de la playa Pucusana, lanzaron 33 que volaron distancias de 50 y 900 kilómetros hacia el espacio.
Cuenta este
servidor público, que durante días y noches científicos norteamericanos llegaron al Perú para estudiar algo que la población peruana desconocía de qué se trataba. Lo que estudiaban aquellos expertos era la franja de alta densidad electrónica, conocida como Ecuador magnético, en donde ocurren fenómenos ionosféricos que se emplearán en el futuro para las comunicaciones a gran distancia, el traslado de grandes naves.
Satélite y peruano
Después se dedicó a estudiar el campo magnético terrestre y temas de actividad espacial, hasta que le tocó impulsar la creación de un satélite peruano
PerúSAT.
“Estaba convencido de que era una necesidad nacional tenerlo, pues conocer todo nuestro territorio y aprender a gestionarlo sería el mayor desafío para nuestro país”.
Treinta años de labor investigativa ininterrumpida, en el
Conida, de trabajo persistente, sin descanso, lo inspiran a afirmar que se ha propuesto poner al servicio del Perú los cohetes Sonda, y crear equipos y materiales que resistan presiones atmosféricas y los 3,000 grados Kelvin.
“Soy un peruano, un servidor público, dedicado a mi trabajo, soñador y creyente de mis sueños, que lo único que quiere es lo mejor para el Perú”. Miguel Ángel es un hombre de acción.
Hoja de vida
*Es ingeniero electrónico graduado y titulado en la UNI.
*Estudió la Maestría de Tecnología Satelital en la Escuela Nacional Superior de Aeronáutica del Espacio (Toulouse - Francia), se especializó en el Sistema de Lanzadores de Satélites.
*Tiene estudios concluidos de Doctorado en Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible en la UNFV.
*Ha realizado; estudios de posgrado en Tecnología Satelital y Gerencia de Proyectos Espaciales en Beijing, China.
(FIN) SMS/DOP
JRA
Publicado: 13/6/2019