Poblaciones de más de 20 comunidades indígenas de dos reservas comunales: Amarakaeri, en Madre de Dios; y Tuntanain, en Amazonas, participan en proyectos de adaptación ante el cambio climático, basados en la gestión sostenible de los recursos naturales.
Así lo destacó el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) que, junto al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), puso en marcha el proyecto EBA Amazonía, una iniciativa que apostó por combinar la conservación de las Reservas Comunales con un modelo de cogestión conjuntamente con sus poblaciones indígenas.
Lea también:
Esta iniciativa se implementó considerando que la Amazonía es reconocida en todo el mundo como el lugar con la mayor y más rica biodiversidad de nuestro planeta, un paraíso natural que, al igual que en otras partes del mundo, registra los efectos del cambio climático como el aumento de la temperatura y de la intensidad de las lluvias, afectando directamente la vida de las comunidades y poblaciones indígenas.
Lea también:
La Reserva Comunal Amarakaeri (Madre de Dios) y la Reserva Comunal Tuntanain (Amazonas) fueron las elegidas para convertirse en los pilotos de esta iniciativa y garantizar así la conservación de más de 500,000 hectáreas de alto valor cultural y natural.
Asimismo, se implementaron otros tipos de mecanismos de cogestión como la suscripción de 22 acuerdos de conservación, la consolidación de escuelas de líderes organizacionales, la implementación del Programa de Actividades Económicas Sostenibles, la elaboración de Planes de Vida de las comunidades indígenas y la implementación de mecanismos de sostenibilidad financiera de los ECA.
Lea también:
Durante la ceremonia de cierre del proyecto se destacó que todo ello contribuyó a que se generaran ingresos anuales por 2 millones 156,996 soles en beneficio de 571 familias de más de 20 comunidades indígenas; esto representa un incremento de 160 por ciento de los ingresos que antes percibían las familias en la Reserva Comunal Tuntanain y 60 por ciento en la Reserva Comunal Amarakaeri.
El proyecto permitió además garantizar la seguridad alimentaria de estas familias al incrementarse en 20 por ciento el consumo de peces y en 70 por ciento el consumo de aves.
Lucía Ruiz, viceministra de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente, sostuvo que hoy no se marca el final de todo lo que implica el proyecto sino el inicio de una nueva etapa en la que se fortalecerá aún más el trabajo conjunto entre el Estado y las comunidades indígenas para continuar con una gestión efectiva de estas Reservas Comunales y el uso sostenible de sus recursos naturales y servicios ambientales.
Lea también:
Por su parte, el jefe del Sernanp, Pedro Gamboa, destacó que este proyecto simboliza una muestra más de las múltiples oportunidades que brindan las áreas naturales protegidas para el desarrollo sostenible de sus poblaciones locales, teniendo como objetivo su empoderamiento en la conservación de estos espacios que representan además sus territorios sagrados.
Con el cierre de este proyecto se plantea ahora un nuevo reto, replicarlo en las otras 8 Reservas Comunales que existen en el Perú, así como en las demás categorías de áreas naturales protegidas a escala nacional. Para ello se deberán priorizar dos puntos clave: promover acuerdos de conservación y el desarrollo de actividades productivas mediante el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales.
El evento contó con la participación de Rosa Morales, directora general de Cambio Climático y Desertificación del Ministerio del Ambiente; José Carlos Nieto, director de Gestión de Áreas Naturales Protegidas del Sernanp; James Lesli, asesor técnico del PNUD; Fermín Chimatani, presidente del Anecap; Jessica Tsamajain, jefa de la Reserva Comunal Tuntanain; y Asvin Flores, jefe de la Reserva Comunal Amarakaeri.
Más en Andina:
(FIN) NDP/MAO
Publicado: 21/5/2018