La prisión preventiva dictada contra Keiko Fujimori se basó en inferencias y presunciones, dijo hoy su abogada Giulliana Loza, durante la audiencia del Tribunal Constitucional (TC) en el que se analiza el hábeas corpus a favor de la libertad de la lideresa de Fuerza Popular.
“La resolución que impone la prisión preventiva, si está marcada por algo, es por meras inferencias y presunciones. No lo digo yo, de manera textual está en las resoluciones, no hay un acto concreto ni en la imputación por organización criminal ni en la imputación por lavado de activos", indicó.
Argumentó que la sala que impuso la medida por presunta obstrucción a la justicia, basada en declaraciones de "un testigo protegido y tres testigos de corroboración que no corroboran un acto mínimo" de
Keiko Fujimori.
Según señaló, la propia sala evidenció que el testigo protegido (testigo número 3) mentía y se contradecía, pero tomó su "declaración fraccionada".
"Aquí no hay solo afectación a la motivación, hay afectación al derecho de defensa que debiera ser reparado para el caso de la señora Fujimori y en todas las audiencias de prisión preventiva de manera general", agregó la abogada.
Sostuvo, además, que los requerimientos y citas de audiencia de la sala se daban en menos de 24 horas, y en estas se incorporaban nuevos elementos de convicción, sobre los cuales no eran informados con anticipación y no podían presentar pruebas de defensa.
"Invoco al tribunal para que se repare eso, es una práctica indebida, tuvimos decenas de audiencias maratónicas sin descanso, debe repararse por el bien de la ciudadanía", afirmó Loza.
"La señora Fujimori ni ningún ciudadano peruano merece estar privado de su libertad en base a presunción, conjetura y especulación, sea o no una política, estamos hablando de un ciudadano que merece el respeto de sus derechos", subrayó la abogada.