Karina Garay RojasLa velocidad con la que vivimos el día a día, llena de tareas de todo tipo, a nivel laboral, personal y familiar, provoca que la mayoría de las veces experimentemos un desbalance que tarde o temprano tendrá efectos negativos en nuestra salud y estado de ánimo.
“Cuando hay desequilibrio es posible que surja la enfermedad. Como seres humanos lo que debemos buscar es el equilibrio, saber cómo ser coherentes y respetuosos con lo que sentimos, en cuerpo, mente y alma”, sostuvo Guisella Vargas, meditadora y directora de Conectados Global Media.
En entrevista con el programa Saludable Mente de Andina Canal Online, la experta relató que la práctica del mindfulness le cambió la vida hace ocho años, cuando al igual que muchas personas trabajaba sin parar, dormía muy mal, hasta que llegó el colapso y con él la necesidad de un cambio radical.
“Me salvó la vida”
“El Mindfulness me salvó la vida”, sostiene, razón por la que comparte en primera persona la eficacia de este modo de vida, que no se reduce únicamente a la meditación.
“No se trata solo de meditar, involucra una serie de actividades, ejercicios, un estilo de vida. Lo importante aquí es que no se requiere un tiempo enorme para encontrar el equilibrio, lo que se requiere es estar presente en todo momento”.
Aunque suene a un juego de palabras y hasta irónico, Vargas refiere que la mayoría de nosotros, vivimos en automático y “no estamos presentes” en las cosas que hacemos, debido a que nuestra mente está divagando en el pasado o en el futuro, pero siempre en otro lugar donde el cuerpo no está.
“Por ejemplo, estamos barriendo, pero estamos pensando en mil cosas. El mindfulness te invita a barrer, pero conectándote con tu momento presente, con tu casa, con tu hogar y en ese momento que barres, que está haciendo esa acción, das gracias por el hogar que tienes, lo bendices, das gracias por los objetos que tienes y por quienes viven allí.
Esa conexión con el momento presente ayudar a equilibrar nuestras vidas”.
Ahora que vivimos en medio de una pandemia, afirma, es cuando más necesitamos armarnos de valor para salir adelante y “conectarnos con nuestro centro energético”, con nuestro cuerpo.
Cuidado con las toxinas mentales
“El corazón tienen más de 40, 000 ‘neuronas’ que le envían señales al cuerpo todo el tiempo y le dicen qué hacer. Cuando estamos con ira, frustración o miedo, emociones negativas, el cerebro le va a decir al corazón que se ponga en una situación de ataque o defensa, como la que vivimos ahora”.
De esta manera, se disparan las hormonas de cortisol y adrenalina, químicos que nos ayudan a defendernos en situaciones de peligro, como salir corriendo ante un perro rabioso, pero que si se segregan de manera constante pueden debilitar nuestro sistema inmunológico, convirtiéndonos en presas fáciles de virus, bacterias o cualquiera enfermedad,
incluso el cáncer.
“Los pensamientos negativos nos llenan de toxinas. Las toxinas se irradian al cuerpo a través de las emociones negativas. Es así como tenemos exceso de cortisol, adrenalina y otros químicos en el cuerpo, que nos harán daño. Eso ocurre cuando nos sentimos sobrecargados, abrumados por el exceso de trabajo, por pensamientos negativos”.
Mente sana y productiva
Para la especialista, es fundamental recordar que “somos más útiles cuando la mente está sana. Somos más útiles a nuestra familia, hijo, esposos y a nosotros mismos, si nuestra mente está bien”.
Y para lograrlo, hay que empezar por darle un respiro, al igual que a nuestro cuerpo.
“Si vas a estar conectado a la pantalla durante ocho horas sin hacer una pausa ¿te estás amando? ¿puede ser posible que haya personas en teletrabajo aguantándose las ganas de ir al baño en lugar de hacerlo? ¿Eso es amarse?”, se preguntó.
Cuidar nuestro cuerpo y nuestra mente es un derecho, agrega, que debemos tener presente en todo momento.
“Hay que preguntarse siempre ¿vale la pena trabajar de forma tan intensa que nos enfermemos? ¿Cuánto de vida nos va a quedar si seguimos a ese ritmo? ¿Si no hacemos una pausa cuando nos sentimos agotados, cansados, que va a pasar con esa máquina que es nuestro cuerpo? ¿Qué pasa cuando el organismo no dé para más?”.
La experta nos recuerda que el cuerpo no es un aparato cualquiera, con repuestos que se pueden comprar en cualquier lugar. No es tampoco un electrodoméstico que si no funciona bien lo podemos desechar sin más y comprar otro.
“Hoy más que nunca necesitamos valorar la vida. Los estudios internacionales han demostrado que el mindfulness no solo reduce el estrés, la ansiedad, la depresión, sino que reconstruye las neuronas, mejora la concentración, la memoria, con lo cual vamos a ser más productivos si lo practicamos”.
Respirar y estar presente
La experta deja en claro que si tenemos un mal momento tenemos todo el derecho a estar tristes y llorar y eso no está mal. Por el contrario, mientras lloramos segregamos oxitocina, considerada la hormona del amor porque reduce el
cortisol.
“La oxitocina se segrega también cuando cantamos, bailamos, abrazamos, cuando nos amamos y eso tiene que ver con tener momentos mindfulness, instantes de conciencia, de cuidado con uno mismo”.
Durante el programa, Guisella Vargas se animó a meditar en vivo para enseñar los pasos a seguir cuando uno desee hacerlo en casa, ya sea de manera personal o familiar. Puedes ver el video en
este enlace.
“El mindfulness es una herramienta fácil de practicar. No necesitas ir a un gimnasio. Lo puedes hacer desde la comodidad de tu hogar. Lo importante es que lo practiquemos a diario o de forma constante. Se requiere un compromiso para cambiar y sentir sus beneficios”.
Para quienes deseen conocer más sobre el Mindfulness pueden ingresar a la página oficial de la especialista www.conectadosglobalmedia.pe donde podrán encontrarán consejos y recomendaciones para tener una vida plena y presente, además de una herramienta de autodiagnóstico sobre los niveles de ansiedad, depresión o estrés que uno puede estar experimentando.
“Allí encontrarán el Programa de Meditaciones “Consciencia de Amor Infinito”, totalmente gratuito, que puede descargarse como audiolibros, dirigido a todos quienes desean mejorar su bienestar personal y familiar. Hay meditaciones diarias, de 20 minutos y otras que duran un poco más”, detalló.
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(FIN) KGR
Publicado: 5/4/2021