Andina

Más de 3,500 personas disfrutaron de la tradicional porciúncula en el Rímac

Franciscanos prepararon histórico puchero cerca a convento de los Descalzos

Foto: ANDINA/Dante Zegarra.

13:46 | Lima, ago. 2.

Más de 3,500 comensales disfrutaron de la tradicional porciúncula, una sopa semejante al menestrón que cada 2 de agosto se sirve en honor a san Francisco de Asís, en el convento de los Descalzos del Rímac, informó el hermano franciscano Roque Chávez Castro, quien desde hace más de tres décadas encabeza esta actividad.

En declaraciones a la Agencia Andina, el religioso brindó detalles respecto de esta tradición social y religiosa mediante la cual se prepara una olla común que se reparte luego de la misa celebrada en honor del santo, alrededor de las 13:00 horas


Chávez indicó que este tradicional puchero data de 1912, cuando se formó la provincia franciscana de San Francisco Solano, en honor a quien fuera el primer superior del convento rimense.

“Solano caminaba desde Alto Perú (actual Bolivia) hasta Tucumán tocando el violín. De este modo atraía a las personas de los pueblos y las bautizaba”, comentó respecto de este santo nacido en España, pero que hizo toda su labor evangelizadora en Perú.


Chávez Castro refirió que este tradicional puchero posee un sabor característico debido a que se usa leña para su preparación, además de un aderezo especial.

Explicó que hace muchos años, en esta fecha, las personas llegaban al templo para rezar, pues, de acuerdo con su devoción, de este modo se podían sacar almas del purgatorio.

Las personas rezaban el rosario y salían de la iglesia. En cada entrada y salida sacaban un alma del purgatorio. Eso fue hasta el Concilio Vaticano II”, explicó Chávez.

Añadió que los sacerdotes se compadecieron de los feligreses y empezaron a preparar este puchero para las personas que rezaban.

Como explica Chávez, actualmente se ofrece indulgencia plenaria el 2 de agosto a los fieles católicos que visitan esta iglesia.

El franciscano agradeció a quienes ayudan en la preparación y con la donación de los alimentos, como el grupo de señoras que se hacen llamar “Las damas de la porciúncula”, así como el Rotary Club y la municipalidad del Rímac.

En esta ocasión se les ha donado 400 kilos de carne, por lo cual podrán atender a un mayor número de personas. Pero también contiene cebolla, zanahoria y otras verduras, además de fideos.

A las 04:00 horas prendo el fuego para que a las 06:00 los peroles con agua estén hirviendo y así poder echar las verduras y la carne”, describió el religioso.

Concluida la misa, los sacerdotes y el obispo auxiliar de Lima, Adriano Tomasi, bendijeron las ollas y pasaron los comensales a degustar la tradicional porciúncula, motivo por el cual la gente la considera “comida bendita”.



(FIN) MAE/LIT
GRM

Publicado: 2/8/2017