Recientemente se publicó el Decreto de Urgencia N° 013-2020, el cual tiene por finalidad mejorar el acceso al financiamiento de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), emprendimientos dinámicos o de alto impacto y startups.
Entre las disposiciones legales, se establecen mecanismos de financiamiento diversos.
Entre ellos, hay uno en particular, que pretende cubrir la brecha de financiamiento que atienden las startups (emprendimientos con componente innovador), que lleva impulsando el sector público y privado desde hace más de un año: El fondo de capital para emprendimientos innovadores.
Este fondo funciona como un “fondo de fondos”, invertirá certificados de participación en fondos, privados y públicos, que se dediquen a financiar startups en su etapa de consolidación.
Este Decreto de Urgencia (DU) parte por implementar medidas para contrarrestar el bajo aceleramiento de la economía mundial, lo cual es probable que se extienda también durante este año.
Asimismo, tiene también como objetivo, servir como un apoyo para las pymes o empresas de alto impacto ante la desatención que sufren en el mercado financiero, y que se podrá ver más afectado por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, y ante la incertidumbre de ver como responderán las economías de América Latina.
“Frente a este escenario, es necesario inyectar liquidez, desde el sector público y privado, aprovechando las buenas prácticas del benchmark regional y mundial, para asegurar la sostenibilidad de estas innovadoras empresas.”, señala la gerente senior y líder de Seed by EY, Desirée Alayza.
Con la finalidad de mostrar las principales características de esta norma, EY Perú precisa lo siguiente:
¿Qué es el fondo de capital para emprendimientos innovadores?
Es un vehículo financiero mediante el cual se puede invertir en fondos públicos y privados para que éstos, a su vez, inviertan en startups en su etapa de consolidación en el mercado y, de esta manera, podamos conseguir que los nuevos modelos de negocio disruptivos, startups, encuentren financiamiento.
“Existen startups peruanas con gran potencial que pierden la oportunidad de entrar al mercado internacional, por no encontrar financiamiento en su etapa de crecimiento”, indica Desirée Alayza.
“Esta brecha se encuentra principalmente en rondas de capital con tickets que oscilan entre los 350 mil dólares, llegando hasta más o menos 2 millones de dólares. Tengamos en cuenta la cifra que estimó la Asociación Peruana de Capital Semilla y Emprendedor (Pecap) de una oferta de capital de 145 millones de dólares entre el año pasado y el 2022”, agrega.
¿Quiénes ganan con esta nueva forma de financiamiento?
Es un win-win: ganan los inversionistas y los emprendimientos innovadores o startups.
“Los inversionistas ganan porque, al ser una parte financiada por el Estado, probablemente sea el 20% de la inversión total en cada fondo de ´venture capital´, disminuyen su percepción de riesgo”, refiere Alayza.
“También ganan los emprendedores innovadores o startups, porque se espera un mayor dinamismo para esta industria, un mayor interés en invertir en ellas y en que se desarrollen sus modelos de negocio. Finalmente, considero que ganamos todos, las startups generan empleos y un desarrollo más sostenido del país”, agrega.
¿Qué tipo de startups podrán obtener estos financiamientos?
Las startups son emprendimientos dinámicos y de alto impacto a un gran número de la población. Este tipo de emprendimientos necesariamente deben incluir el componente innovador en sus modelos de negocio.
Es importante considerar el momento en esta etapa de inversión: se considera que este fondo beneficiará a aquellas startups que se encuentran en etapa de consolidación en el mercado.
Es decir, no son startups nuevas que recién están creándose, diseñándose o que están levantando capital semilla; son aquellas que ya pasaron por todas estas etapas, y sobre todo, que ya están validadas en el mercado y tienen una atracción y un número de ventas interesante.
Por lo tanto, solo requieren terminar de consolidarse en el mercado, expandirse o internacionalizarse. Y, es en ese sentido, que el “capital emprendedor” entra a impulsar.
“Se busca invertir en startups que tengan un crecimiento exponencial, cerca del 40 %, que cuentan con un negocio innovador y que puedan ser replicables en otros marcos regulatorios”, señala Alayza.
“Sin embargo, aún es necesario que ésto sea definido en el reglamento, el cual estará según indica el DU debiera estar listo a fines de abril. En éste, se van a indicar los requisitos y características que debieran tener tanto el fondo al que se le va a invertir, así como los proyectos en los que pueden invertir este tipo de fondos con el aporte del fondo de capital de emprendedores innovadores”, agrega.
¿Quién administrará este fondo?
La entidad designada es la Corporación Financiera de Desarrollo (Cofide) y será la encargada también de establecer las bases del reglamento de la norma. Cofide administrará el fondo, bajo la figura financiera del fideicomiso.
¿En qué otros países funciona esta forma de financiamiento?
México, Colombia y Chile son los países de la Alianza del Pacífico, y han venido trabajando bajo este mecanismo de inversión desde el sector público, logrando incentivar al sector privado, apalancando un aproximado de 20-25% en los fondos privados que logran levantar un 80% desde el sector privado.
Obteniendo, a su vez, buenos resultados a partir de políticas de inversión autónomas. En estos tres países, a partir de estos incentivos financieros, se han logrado consolidar mucha más masa crítica de startups de “calidad”, algunas de las cuales ya son reconocidas a nivel mundial: Rappi, por ejemplo.
“El benchmak nos da estadísticas de fondos de venture capital, suelen obtener rentabilidades de 3 veces el capital invertido, es decir, retornos de por encima del 20% al año, a nivel mundial estas cifras incrementan”, subraya Alayza.
Asimismo, señala que en el Perú, nos estamos sumando de forma tardía a esta tendencia, pero podemos aprovechar la curva de aprendizaje de lo que han venido haciendo otros países con sociedades parecidas a las nuestras, como México, Colombia y Chile.
“Considero que es un buen momento, pues tenemos una masa crítica de startups peruanas interesantes y creo que los inversionistas van a saber aprovechar esta oportunidad. La idea es seguir desarrollando esta industria y su ecosistema, que sin duda alguna requiere de financiamiento sostenible en el tiempo”, puntualiza Alayza.
Más en Andina:
(FIN) MDV / MDV
Publicado: 10/2/2020