Para ganar el concurso, Serquén propuso crear y entregar a médicos, enfermeros y biólogos un total de 1,000 protectores faciales, que contribuye a reducir el riesgo de contagio del coronavirus.
El premio conseguido fue un financiamiento de su proyecto. Al conseguirlo, Serquén compró una segunda impresora 3D y nuevas herramientas de empaque y sellado. Esto le ha permitido donar los primeros 1,000 ejemplares al Hospital Regional de Lambayeque, en beneficio de más de 500 miembros del personal de salud de las localidades de Chiclayo, Belén y Ferreñafe.
El arquitecto tiene un taller en su casa, donde junto a su madre y parientes producen los protectores que tienen la particularidad de cambiar la lámina frontal y estar diseñados para los requerimientos del personal médico.
El próximo paso de Serquén es seguir entregando más protectores faciales a otros grupos vulnerables que necesitan acudir protegidos a los nosocomios, como las personas con discapacidad, niños de albergues o gente con enfermedades críticas como el cáncer.
(FIN) NDP/LZD/MAO