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“La pandemia nos obligó a cambiar la forma de desarrollar iniciativas responsables”

Ejecutivos evalúan prácticas de responsabilidad social empresarial en tiempos de covid-19 y reactivación

Iniciativas de responsabilidad social empresarial en tiempos de pandemia y reactivación. ANDINA/Difusión

Iniciativas de responsabilidad social empresarial en tiempos de pandemia y reactivación. ANDINA/Difusión

23:55 | Lima, set. 19.

Definida como la gestión ética y moral de las decisiones, acciones e impactos que genera una empresa en su entorno social, económico y natural, la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es un desafío doble en tiempos de pandemia por covid-19 y reactivación económica.

“La pandemia nos obligó a cambiar la forma de desarrollar iniciativas responsables”, asegura Luis Zapata, gerente de Comunicaciones y Sostenibilidad de Lima Expresa, empresa a cargo de la concesión de la Vía de Evitamiento y la vía expresa Línea Amarilla.

“Tenemos diversos planes de RSE programados en el año, pero siempre estamos atentos a las ocasiones en que podemos sumar con nuestro granito de arena”, explica Jessica García, gerente de Marketing y Reputación de San Fernando, productor de alimentos con aporte proteico, como pollo, pavo, cerdo, huevos y embutidos. 

“Valores como el respeto y el bienestar de nuestros colaboradores y la seguridad ocupacional, que son elementos clave en la gestión de nuestras actividades, han cobrado más fuerza", afirma Oscar Echegaray, gerente de Capital Humano y Asuntos Corporativos de la empresa agroindustrial Virú.

Acción directa

Desde el 15 de marzo, cuando se declaró el estado de emergencia sanitaria en el Perú por la pandemia, diversas empresas locales han apoyado a grupos vulnerables, principalmente con alimentos, medicinas, equipos médicos y servicios relacionados con la bioseguridad de la comunidad. 

Lima Expresa, por ejemplo, se inspiró en la señalética vial para preparar Manuales de Educación Vital con nuevos patrones para el uso responsable de internet, precauciones al compartir ‘noticias’ alarmantes, mantener la distancia social y medidas de higiene al salir a la calle y volver a casa. 

Además, donó al municipio del Rímac un lote de afiches y adhesivos para señalizar 27 mercados y comedores populares con información para prevenir contagios de covid-19. “Queremos que los vecinos aprendan de las señales del manual y las apliquen a diario”, comenta Luis Zapata. 

En situaciones de crisis debemos ser solidarios con quienes más necesitan, agrega el vocero, al precisar que su empresa –entre otras acciones– entregó alimentos a 200 familias del Rímac, además de mantas abrigadoras a vecinos de Villa María del Triunfo y San Juan de Lurigancho.

El contexto de pandemia nos llevó a reinventar la forma de seguir contribuyendo a la mejora de la calidad de vida de las localidades vecinas a la concesión de la Vía de Evitamiento y la Línea Amarilla, acota.


Poblaciones vulnerables

En San Fernando, “elegimos el soporte de las organizaciones ya que las consideramos como un canal más eficiente para colaborar con las poblaciones vulnerables, así como en situaciones de emergencia, campañas y asistencia a quienes requieren apoyo”, manifiesta Jessica García.

Así, para aliviar el impacto de la pandemia, la empresa donó conservas de pollo a través del soporte del Banco de Alimentos y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci). “Colaboramos con 71,000 cajas de alimentos con aporte proteico, que consisten en casi 600 toneladas”.

“Con esta acción, garantizamos que las poblaciones vulnerables reciban proteína de calidad, en las mejores condiciones de conservación, en cualquier lugar geográfico, sin importar su lejanía”, detalla la gerente.

Además, la empresa se sumó al esfuerzo colectivo de construir una planta de oxígeno en Huaral, a través del Obispado de Huacho. “Estará ubicada en el hospital San Juan Bautista de Huaral y permitirá distribuir este recurso vital a las 52 postas médicas ubicadas en Chancay”.


Sanidad y fumigación

Como empresa socialmente responsable, Virú ejecuta un programa de trabajo alineado con la sanidad, la fumigación y la desinfección, desde el inicio de la emergencia en el país, beneficiando a todos sus stakeholders de influencia, detalla Oscar Echegaray.

En el marco de esta iniciativa, han sido fumigados y desinfectados diversos locales municipales, centros poblados, comisarías, centros de salud, plazas, y mercados –entre otras instituciones y espacios de alto tránsito– en Ica, La Libertad, Áncash, Lambayeque, San Martín y Lima. 

“Con este programa hemos beneficiado a más de 18,000 familias”, añade el gerente de Virú, al explicar que también se otorgó apoyo social, mediante la donación de alimentos, materiales de higiene y equipos de desinfección, más una importante donación económica a las clínicas San Juan de Dios.

A estas acciones se sumó la creación del programa radial ‘Virú le hace frente al Covid-19’ –para sensibilizar a la población– en las principales radios de la provincia liberteña de Virú. “Seguiremos fortaleciendo nuestras buenas prácticas, valores y cultura organizacional”, enfatiza.


Más que una crisis de salud

“La pandemia de covid-19 es mucho más que una crisis de salud: está afectando profundamente a las sociedades y las economías”, declaraba la ONU en abril de este año, en el documento Marco de la ONU para la respuesta socioeconómica inmediata ante el covid-19.

Lo más probable es que esta crisis elevará los niveles de pobreza y las desigualdades a escala global, añadía la ONU, en la etapa de escalada del coronavirus. En consecuencia, "el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) se vuelve aún más urgente". 

Pero, ¿qué son los ODS? Son el plan maestro para conseguir un futuro sostenible para todos. “Para no dejar a nadie atrás, es importante que logremos cumplir con cada uno de estos 17 objetivos para el año 2030”.

En el Perú, las empresas están poniendo énfasis en tres objetivos: acción por el clima (ODS 13), producción y consumo responsable (ODS 12) y trabajo decente y crecimiento económico (ODS 8), observa Lisa Bunclark, doctora en Gestión Sostenible del Agua y profesora de Centrum PUCP.

En realidad, esos objetivos están directamente vinculados con su quehacer diario: las empresas dan trabajo, afirma Bunclark. Sin embargo, hace falta que se interesen también por los otros objetivos de desarrollo sostenible, el país necesita que “cada empresa contribuya con los 17 ODS”.


En el ADN de la empresa

“Hay todavía muchas empresas que necesitan trabajar desde la línea de la responsabilidad social y la ética, desde una conducta empresarial de respeto a sus colaboradores, clientes, la comunidad y al medio ambiente”, opina la directora de Sostenibilidad de Centrum PUCP, Julianna Ramírez.

“El sustento de la RSE está en la ética y la moral de los ejecutivos”, sentencia Rubén Guevara, profesor del Programa de Formación para Periodistas en Responsabilidad Social y Sostenibilidad que desarrolló Centrum. “La gestión con enfoque de responsabilidad social debe estar en el ADN de cada empresa”.
 

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(FIN) CCH

Publicado: 19/9/2020