El desplome del techo sobre el centro del fuego que originó el incendio en la fábrica textil de Ate, impide a los bomberos controlar el incendio que se originó a las 15:00 horas.
El jefe departamental de Bomberos Voluntarios de Lima Centro, Mario Cassaretto, explicó que el enorme techo no permite que los bomberos controlen las lenguas de fuego que aún no pueden extinguir.
Cassaretto agregó que además del tamaño del techo, el material del que está fabricado es un problema pues es de eternit conocido elemento inflamable que hace difícil el control del siniestro.
Por ese motivo, precisó Cassaretto, los bomberos deben de trabajar a dos niveles: desde la base formando un círculo que van cerrando según detienen el fuego, y por arriba con chorros de agua que van echando gracias a las escaleras periscópicas que les permite enfriar el ambiente al mismo tiempo.
Drones para los bomberos
Cassaretto destacó en esta oportunidad el uso de drones como herramienta de trabajo para los bomberos pues les ha permitido ubicar rápidamente los focos del incendio para actuar rápidamente en él.
El CGBVP no cuenta con ese equipo tecnológico por el momento, señaló, sin embargo, agradeció la rápida gestión de la Municipalidad de La Molina para poner disposición los drones de la comuna.
Tampoco cuenta con equipos de aire que el personal utiliza para ingresar a zonas o áreas cargadas de calor y humo.
A esta hora de la noche más de 100 mujeres y hombres de rojo, ya se encuentran en la remoción de escombros y remojado del local, continúan en la labor de control del incendio.
El local fue un gran almacén en donde se guardaban diferentes productos, como abarrotes, algodón, telas, balones de gas licuado de petróleo (GLP), entre otros.
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(FIN) SMS