El Presidente de la República, Martín Vizcarra, participa en las exequias y homenajes que se tributan al ex secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU) Javier Pérez de Cuéllar.
Vizcarra Cornejo esperó el cortejo fúnebre con los restos del exembajador peruano en el frontis del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Acompañan al Mandatario el titular del Consejo de Ministros, Vicente Zeballos; el canciller Gustavo Meza-Cuadra, y el director de la Academia Diplomática, Allan Wagner.
Entre las medidas establecidas figura que el Pabellón Nacional será izado a media asta en todos los edificios públicos, instalaciones militares, bases, buques, locales policiales y demás dependencias del Estado en el territorio nacional, lo que también se aplicará en las misiones diplomáticas, consulares y representaciones permanentes de Perú en el exterior.
Como es de conocimiento público, el pasado miércoles 4 de marzo el ex secretario general de la ONU falleció, a los 100 años de edad.
Pérez de Cuéllar ocupó el máximo cargo del organismo mundial de 1982 a 1986 y de 1987 a 1991, desde el que contribuyó al fin de la Guerra Fría; a facilitar acuerdos de paz, entre Irán e Irak, Namibia, Afganistán, El Salvador, Nicaragua, entre otros.
Además, al fortalecimiento de las operaciones de mantenimiento de la paz, que le hicieron merecedor del
Premio Nobel de la Paz; a la adopción del concepto de desarrollo sostenible y sus tres dimensiones: económica,
social y ambiental; entre otras numerosas acciones efectivas y reconocidas internacionalmente.
Tras una de las más graves crisis republicanas, Pérez de Cuéllar aceptó el cargo de presidente del Consejo de Ministros
y ministro de Relaciones Exteriores, entre noviembre del 2000 y julio del 2001, para hacer efectiva la recuperación
de la democracia representativa y la celebración de elecciones libres y transparentes; así como restaurar la
posición internacional de Perú.