La misión especial del Fondo Monetario Internacional (FMI), que recientemente realizó una visita oficial al Perú, elevó la proyección de crecimiento de la economía peruana de 4% a 4.1% para el año 2019.
“Se prevé que el
crecimiento acelere a más del 4% en el 2019, acercándose gradualmente al potencial, a partir de entonces”, indica el informe preliminar de esta misión.
“Asimismo, dado el aumento de los precios de las materias primas y la agenda de reformas del Gobierno, el personal ha aumentado su estimación del crecimiento potencial a mediano plazo del 3.75% al 4%”, agregó.
La misión del
FMI sostiene que la fuerte demanda interna, especialmente una mayor inversión privada, debería ser el factor clave para esa expansión del Producto Bruto Interno (PBI).
Indicó que se espera que el crecimiento rebote 3.7% en el 2018 con la inflación convergiendo al rango meta (entre 1% y 3%) del Banco Central de Reserva (BCR).
La misión del FMI señaló que el crecimiento del PBI de 3.2% en el primer trimestre del 2018, y los indicadores de alta frecuencia para abril, apuntan a un repunte de la actividad económica este año.
“Un factor clave es el aumento de la inversión pública, mientras que también se prevé que la inversión privada crezca después de cuatro años débiles. Esto último estará respaldado por condiciones monetarias fáciles y un clima de crédito e inversión más favorable, que generalmente sigue a las mejoras en los precios de las materias primas”, agregó.
La misión del FMI sostuvo que con la inflación de los precios de los alimentos normalizándose a lo largo del año, se espera que la inflación general aumente gradualmente hacia el centro del rango meta del BCR.
“Perú ha sido uno de los mejores en América Latina desde el cambio de siglo, pero el crecimiento se ha desacelerado recientemente. El sólido crecimiento ayudó a reducir la pobreza significativamente, la inflación se mantuvo baja, la posición fiscal se fortaleció, la dolarización se redujo notablemente y la profundización financiera continuó”, dijo.
“Hace poco, las peores inundaciones y derrumbes en la historia, y las consecuencias del escándalo de corrupción Lava Jato, contribuyeron a una desaceleración en el crecimiento del PBI hasta un nivel de 2.5% en el 2017”, añadió.
La misión del FMI consideró que después de la renuncia del presidente Pedro Pablo Kuczynski, el nuevo Gabinete Ministerial, encabezado por César Villanueva, se ha movido rápidamente para implementar medidas y solicitar poderes legislativos especiales al Congreso de la República.
“Las medidas fiscales incluyen alzas del impuesto especial, la mejora de la administración tributaria y la racionalización de los gastos corrientes”, explicó.
La misión del FMI indicó que la Ley N° 30737 (que reemplazó al Decreto de Urgencia N° 003 en el marco del caso Lava Jato) brinda más claridad sobre los daños civiles en los casos de corrupción y establece las reglas para las transferencias de activos por parte de las compañías de construcción bajo investigación o a los condenados.
“Además, se solicitaron poderes especiales en seis áreas: política y administración tributaria, competitividad, infraestructura de reconstrucción y cierre después de El Niño (ya otorgadas), medidas anticorrupción, protección de grupos vulnerables, y modernización del Estado”, destacó.