A partir de ahora los establecimientos de salud y los Centros de Emergencia Mujer (CEM) atenderán de forma conjunta a las mujeres que hayan sufrido violencia física, sexual o psicológica, a fin de evitar su revictimización y lograr que salgan finalmente del círculo de agresión en el que viven.
Esto es posible gracias al Decreto Supremo N° 008-2019 que aprueba el Protocolo de actuación conjunta entre los Centros Emergencia Mujer (CEM) y los Establecimientos de Salud (EE.SS) para la atención de las personas víctimas de violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar, en el marco de la Ley N° 30364, y personas afectadas por violencia sexual.
“Este documento es histórico porque es firmado por el señor presidente, la ministra de Salud y la ministra de la Mujer. Es el primer documento biministerial en este campo, mostrando explícitamente la decisión política de enfrentar de forma integral la violencia que amenaza a las mujeres y muchas familias del país”, manifestó Vanessa Herrera de la Dirección Ejecutiva de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa).
Explicó que el protocolo establecerá de forma clara cómo se realizará el enlace ente ambas entidades para atender los casos de violencia, así como determinar el grado de lesiones que padecen las víctimas.
Siempre acompañadas
“Las mujeres en situación de violencia deciden muchas veces ir a una comisaría o un Centro de Emergencia Mujer, pero pocas van a un servicio de salud. Entonces, no se atiende su salud física y mental que también está afectada. Algunas tienen infecciones de transmisión sexual y no lo saben, y así siguen el ciclo de violencia y sigue el maltrato a los niños. Con esta norma vamos a evitar que esto continúe sucediendo”, dijo Herrera.
La especialista manifestó que el enlace entre los servicios de salud y los CEM es clave, porque “es la puerta de entrada” para resolver una serie de problemas que aquejan a las víctimas y puedan ofrecer rápidamente los servicios que ellas necesitan.
Ya sea que ingresen por un CEM o por un servicio de salud, las mujeres serán acompañadas durante todo el proceso de atención y tratamiento que requieran.
“El CEM hará la acogida, la primera intervención, pero el plan de terapia lo hará el Ministerio de Salud. Si se trata de un problema de salud mental intervendrá el centro de salud mental comunitario, si hay una afectación en su salud sexual y reproductiva lo verá un servicio materno infantil. Si es algo leve lo verá un centro de salud cualquiera, pero si es emergencia por violación o intento de feminicidio lo verá un hospital general”, detalló.
Habrá un comité territorial
La especialista destacó el acompañamiento permanente que se hará de la víctima hasta que se estabilice y supere la violencia que padece.
“Se establecerá un Comité Territorial para no soltar el caso. Habrá un acompañamiento más cercano. Ahora mismo empezaremos un proceso de implementación y entrenamiento de todos los facilitadores nacionales para mejorar la ruta de actuación conjunta", señaló.
Agregó que esto ayudará a evitar que estas mujeres pierdan el trabajo, la motivación, puedan seguir cuidando a su familia y sobrevivan a una situación tan dolorosa. Esta intervención mejorará, en el largo plazo, su pronóstico de recuperación, evitando que continúen en el círculo de la violencia.
De acuerdo a la Encuesta Demográfica y Salud Familiar (ENDES 2017) el 65.4% de las mujeres sufrieron, alguna vez, algún tipo de violencia por parte de su esposo o compañero. Se evidenció además que el mayor número de casos fue por violencia psicológica y/o verbal (61,5%), seguido de violencia física (30,6%), la violencia física (30,6%) y violencia sexual (6,5%).
De acuerdo a las estadísticas del Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Mujer del MIMP, durante el año 2017 los CEM atendieron a nivel nacional 48,120 casos de violencia psicológica, 37,752 casos de violencia física y 9,012 casos de violencia sexual, sumando un total de 94, 884 personas afectadas por violencia contra las mujeres e integrantes de un grupo familiar.
De otro lado, en el sector salud, durante el año 2017, los establecimientos de salud del Ministerio de Salud atendieron 96, 107 casos de violencia.
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(FIN) NDP/ART
Publicado: 21/4/2019