El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes dos órdenes ejecutivas que impondrán gravámenes arancelarios del 25 % a las importaciones de aluminio y el acero.
La Casa Blanca aseguró que los aranceles serán aplicados a nivel global y que no habrá excepciones a ningún país en importaciones de acero y aluminio.
Canadá es el principal origen del acero importado por EE. UU., seguido de México, Corea del Sur, Brasil y Vietnam, según datos del Instituto Americano del Hierro y el Acero. En cuanto al aluminio, Estados Unidos obtiene casi dos tercios de su suministro de Canadá, de acuerdo a la Asociación del Aluminio.
Durante su primer mandato, en el 2018, Trump impuso aranceles del 25 % a las importaciones de acero y del 10 % a las de aluminio, aunque luego concedió exenciones a países como Australia, Brasil, Canadá y México. Esta vez, la Casa Blanca no ha aclarado si habrá excepciones.
Trump ya adelantó el domingo que tenía intención de imponer nuevos aranceles al acero y el aluminio en declaraciones a periodistas a bordo del avión presidencial Air Force One, antes de asistir a la final del Super Bowl en Nueva Orleans (Luisiana).
Aranceles recíprocos
Trump también adelantó que "probablemente este martes o miércoles" anunciaría aranceles recíprocos a varios países para equiparar los gravámenes que estos aplican a las exportaciones estadounidenses.
No especificó qué países se verán afectados por esos aranceles recíprocos, aunque el presidente ha criticado en reiteradas ocasiones el 10 % que la Unión Europea impone a los automóviles importados, muy por encima del 2.5 % que aplica Estados Unidos.
La medida anunciada hoy es un nuevo ejemplo de su estrategia para utilizar los aranceles, que en más de una ocasión ha calificado como "la palabra más hermosa en el diccionario", como herramienta de negociación para obtener concesiones concretas no solo en comercio, sino también en cuestiones de migración y seguridad.
Colombia, Canadá y México
El mes pasado, Trump anunció aranceles a productos colombianos tras la negativa del presidente Gustavo Petro a aceptar un vuelo con migrantes deportados encadenados, pero dio marcha atrás cuando Colombia acordó seguir recibiendo los vuelos de deportación.
Asimismo, la semana pasada, Trump anunció que pospondría durante un mes la aplicación de un arancel del 25 % que había anunciado sobre todos los productos de Canadá y México, tras un acuerdo con ambos países para reforzar el control fronterizo y frenar el tráfico de fentanilo y la llegada de migrantes.
Trump, sin embargo, sí llegó a imponer un arancel adicional del 10 % a China, que se suma a los ya vigentes desde su primer mandato sobre productos del gigante asiático, lo que llevó a Pekín a anunciar más gravámenes en represalia.